Las campañas políticas en tiempo de pandemia: el caos presente

El autor es Director de Grössman Beyond Marketing MG+ DUB.

En medio de la pandemia arrancaron los tiempos oficiales electorales, las precampañas inician en diciembre de este año y la complejidad de realizar actividades en tiempos de Covid-19 es un reto para todos los posibles candidatos a diferentes puestos de elección popular.

Estas elecciones serán diferentes a todas las demás porque, aunque siempre se menciona, se juega el futuro del país con el ingrediente principal de que serán campañas de mercadeo directo digital, por encima de los actos multitudinarios de otras ocasiones.

Se ha estudiado el perfil del votante sonorense y cabe destacar que un poco más de la mitad de los que pueden votar tienen menos de 30 años.

Son millennials y centenialls con una claridad sobre el tema político debido a la hiperinformación que reciben.

Para ellos los medios tradicionales representan la manipulación, el control y opinión sesgada.

Su fuente de información y opinión son las redes sociales y lo que exista en Internet, y se apoyan en influencers, personajes de las redes, pero confían mucho en la opinión de personas como ellos.

Si nos vamos a la conducta de decisión de voto, encontramos lo siguiente: El 17% de los sonorenses decide por quién van a votar, cuando tienen la boleta enfrente de ellos.

Un 10% decide una semana antes, el 37% durante la campaña, existe un 18% que decide un año antes y 15% siempre vota igual.

Si en 2021 votará el 52% de la lista nominal tendríamos que 202,324 ya decidieron por quién votar y 413,833 son los votantes que hay que conquistar.

El sonorense tiene varios momentos en los que decide por quién votar, lo interesante es que 167,770 siempre votarán por el mismo partido y son electores arriba de 50 años.

La mayor parte de los que votarán en 2021 tiene ingresos de hasta 3 salarios mínimos.

Y un 13% no tiene ingreso.

La conquista se tiene que dar en la clase media.

A la pregunta de qué influye en su decisión de voto, podemos afirmar que el 33% decide por quién votar gracias a la información que recibe del Internet y las redes sociales; un 30% es influenciado por la radio y televisión; el 27% de los anuncios de los partidos políticos, pero un 27% de los comentarios de amigos y familiares.

Si nos vamos a los números tenemos que 344,448 serán gracias a las redes sociales e Internet.

La interacción del votante con las actividades de campaña nos dice que más del 50% de los votantes tuvo algún impacto informativo de los candidatos mediante el uso de la tecnología, esto nos lleva a replantear el viejo modelo de campañas masivas.

Las campañas de comunicación más efectivas serán las de redes sociales con un 40%, seguidas de las que se lancen en televisión con un 33%.

Las menos efectivas son las de prensa con un 7%.

Las encuestas sí influyen en la toma de decisiones, de ahí la guerra que se da por parte de los candidatos con estos ejercicios de opinión.

Pero además el votante está esperando que el candidato les dé algo a cambio de ir a algún evento proselitista.

El caos de las campañas se dará porque la mayoría de los candidatos no está entendiendo la dinámica del elector y su nueva forma de informarse.

Además, estamos ante votantes informados que conocen, buscan y deciden con datos que ellos obtienen de Internet, principalmente.

Las campañas en 2021 deberán ser más tecnológicas, con manejo de big data, aplicaciones móviles, contenidos atractivos para el elector y con un nivel de autenticidad, veracidad y compromiso nunca vistos.

El autor es Director de Grössman Beyond Marketing MG+ DUB.

Consultor en Comunicación y Marketing.