Inversión productiva, la opción para la pandemia económica en México

La autora es directora de Voz Empresarial.

La apuesta del Gobierno federal es la entrega de apoyos sociales o regalar dinero para sacar al pueblo de su vulnerabilidad económica, salud, social y llevarla a otro nivel que le permita tener mejor calidad de vida.

Para este 2020 se tiene programado entregar más de 400 mil millones de pesos en 17 programas sociales como Sembrando Vidas, Jóvenes Construyendo el Futuro, Pensión para Adultos Mayores, becas para estudiantes, apoyo a discapacitados, Tandas para el Bienestar, entre otros.

Este dinero tendrá que salir del pago de los impuestos que los mexicanos hacen y esta economía moral que compar- te lo que trabajan unos para dárselo a los que menos tienen y darles opciones de bienestar, todo muy bien hasta aquí.

El asunto es que en la actualidad con la pandemia del Covid-19 se desquebrajó la economía mundial y el mercado no sólo se achicó, casi desapareció por tres meses en el confinamiento para evitar los contagios, tanto que se proyecta una contracción mundial del 3.7%.

México sería de los países con una de las contracciones mas fuertes en 2020, hasta del 10% según los expertos financieros.

Eso hace que los ingresos se reduzcan haciendo hoy en día un hueco de casi 300 mil millones de pesos en el presupuesto de este año.

Esto le pega no sólo a los 17 programas, sino a la infraestructura del país que se ha reducido drásticamente, al mismo tiempo atora las economías locales.

La gran empresa es el Gobierno federal, tiene el dinero de los mexicanos y hasta ahora no ha hecho ningún plan de reactivación serio para mover las cadenas productivas del país, millones de empresas padecen problemas de liquidez con consumo empequeñecido que no permite generar los recursos que mantengan los empleos perdidos, casi 1 millón 800 mil a julio.

Se suman los 12 millones de informales que no recibieron ingresos en el confinamiento y que los que recibían salarios eran la mitad de lo que recibían en 2019, se pauperizó el sueldo y con ello la capacidad de compra y calidad de vida de los mexicanos que en este año 60 millones de ellos se han vuelto más pobres.

Y la pregunta ¿y los 17 programas sociales? ¿cuáles han sido los resultados en 2019? y ¿cómo van aplicados en el 2020?

¿Han ayudado realmente en esta pandemia?

El reto es hacer que los impuestos sean productivos para hacer una economía rentable y no “moral”, como la que se aplica actualmente sin indicadores reales de impacto.

Qué bueno que en Sonora anuncian 15 proyectos con 10 mil empleos, entre orgánicos y nuevos para cierre de 2020.

Los impuestos deben aplicarse en inversión productiva que genere trabajo y empleos que sustenten la vida económica y social de los sonorenses.

El apoyo solidario a los vulnerables es obligación de los gobiernos, pero la dávida sólo crea ciudadanos atendidos y flojos, sin libertad para exigir, eso sólo asegura base clientelar no ciudadanos libres y protagónicos de su propio destino.

La autora es directora de Voz Empresarial.

aretes0@gmail.com