El cáncer, otra pandemia a la que le dieron la espalda en México

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El Covid-19 vino a paralizar aún más la poca atención que se tiene a los pacientes con cáncer y han sido relegados de una manera terrible, posponiendo quimioterapias, radioterapias y diagnósticos.

El nulo abasto de medicinas por parte de los hospitales ha sido catastrófico para los pacientes que sufren en silencio su dolor y desesperación.

Así como vemos que hay enfermos por el virus en la mayoría de las familias, el cáncer siempre está en 6 de cada 10 familias, en algún miembro de éstas, y ahora han sido violentadas en su derecho constitucional de ser atendidos como lo dicta la Carta Magna, por decisiones políticas no comprobadas de corrupción de las farmacéuticas y de las organizaciones especializadas de la sociedad que atendían a estos pacientes y que ahora se les retiró el recurso porque eran “corruptas”.

Es imperdonable que en esta pandemia del cáncer que no es de ahorita, mueran 15 mujeres diariamente y no se haga lo suficiente ni lo correcto para evitarlo.

Ahorita cada vez se ven en redes sociales y medios de comunicación los enfermos y familiares pidiendo apoyo para la compra de medicinas, hacerse los estudios y traslados a hospitales especializados para aplicación del protocolo médico requerido, etc.

Los familiares de niños con cáncer se han cansado de gritar al Gobierno federal por el apoyo para que sus niños tengan lo necesario.

Ahorita la niña Maribel, de 13 años, es conocida en todo el país, se le diagnosticó leucemia linfoblástica aguda con atención urgente y es hora y día que todavía no le dan los medicamentos para salvar su joven y prometedora vida.

Este Gobierno que se dice de los pobres y habla de acceso a la salud de los mexicanos, les quitó el Seguro Popular que daba los servicios médicos a más de 50 millones que no tienen servicios médicos públicos y dejó en estado de indefensión a miles de mujeres, niños y hombres a la deriva y a la capacidad familiar para sacarlos adelante de tan terrible enfermedad.

¿Qué le pasa al Gobierno federal?

Que paga en programas sociales cerca de 600 mil millones de pesos al año, de dudosa aplicación ya que no tienen ninguna transparencia y se percibe como compra de voluntades para el 2021 para que se fragüe lo que llaman la “Cuarta Transformación” y dejan lo más sagrado, la salud de los mexicanos, para mejores tiempos.

La autora es directora de Voz Empresarial.

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