Ola de calor sin precedente en el Ártico

El autor es Ingeniero Bioquímico con especialidad en Ciencias Marinas Alimentarias por el Tec de Monterrey.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) anunció recientemente que está verificando el informe de una nueva temperatura récord en el Ártico reportada en la ciudad rusa de Verkoyanks, una pequeña comunidad de apenas 1,200 habitantes, en su mayoría de la etnia túrquica yakuto, enclavada en Siberia oriental el 20 de junio.

Reportó 38 grados centígrados.

El registro fue aceptado tentativamente como “una observación legítima, consistente con las medidas actuales en el aire superior en Siberia”, según el experto en condiciones climáticas extremas Randall Cerveny, profesor de ciencias geográficas de la Universidad de Arizona.

En Siberia, se vive una prolongada ola de calor junto con un aumento de incendios forestales.

La región tiene extremos tanto en invierno como en verano.

Las temperaturas superiores a 30 grados pueden darse entre junio y agosto, según el servicio meteorológico ruso, pero no había registro de 38.

Según Cerveny, el fuerte incremento en la temperatura de este verano responde a “la falta de nieve subyacente en la región combinada con los aumentos globales de la temperatura, que han jugado un papel crítico en el calor extremo”.

La OMM asegura que el Ártico es una región que se está calentando al doble del promedio mundial, los incendios aumentan en el noreste de Siberia y junto con el Círculo Polar Ártico, los hielos marinos continúan perdiendo masa.

El volumen de hielo marino del Ártico en el mes de septiembre de 2019, después de la temporada de fusión, disminuyó en más de 50 por ciento, en comparación con el valor medio para ese mes en el lapso 1979-2019.

El hábitat de especies como osos polares, ballenas, focas y caribúes está en peligro a medida que el hielo desaparece por el incremento de temperatura.

De 2016 a 2019, las temperaturas anuales del aire en la superficie siberiana, han sido las más altas registradas, y durante el pasado invierno y primavera boreales superaron constantemente los promedios.

El mes pasado fue el mayo más caliente de que se tenga noticia en todo el planeta, y en Siberia las temperaturas estuvieron hasta 10 grados por encima de la media.

A partir del registro de Verkoyanks, la OMM predice temperaturas más altas de lo normal en los meses de julio y agosto.

Entre las consecuencias posibles está el incremento de incendios forestales, la disminución de las lluvias, la degradación de los espacios costeros y la pérdida de permafrost, la capa de suelo permanentemente congelado en las regiones árticas, lo que provocará liberación de metano incrementado a su vez el riesgo de mayores temperaturas.

Sin duda un círculo vicioso altamente riesgoso.

En Groenlandia, la gran isla danesa junto al extremo noreste del continente americano, los hielos se derriten en forma de ríos que incrementan el nivel del mar, disminuyendo el segundo mayor reservorio de agua dulce del planeta, después de la Antártida.

La tendencia se ve en ambos polos: en febrero, la base de investigación argentina Esperanza, en la Antártida, alcanzó también una nueva temperatura récord, de 18.5 grados centígrados, según el Servicio Meteorológico Nacional de ese país.

Según la OMM acabamos de tener los cinco años más cálidos en la historia.

Nuestro planeta se está calentando a un ritmo descontrolado.

El autor es Ingeniero Bioquímico con especialidad en Ciencias Marinas Alimentarias por el Tec de Monterrey.

gmontanop@yahoo.com