La propuesta de valor después de la sana distancia

El autor tiene Maestría en Dirección de Organizaciones.

El corazón de una empresa es su propuesta de valor, que viene siendo la forma como capta, genera y entrega valor a sus clientes, hay que revisar la propuesta que teníamos antes de todo esto y ver qué cambios hay que hacer o si definitivamente hay que construir una nueva.

La pandemia cambió todo, tomando en cuenta en primer lugar todo lo relacionado con la salud y los cuidados que debemos tener para evitar los contagios de los clientes, colaboradores, proveedores, tomar temperaturas, regalar cubre bocas, gel antibacterial y estar pendientes de todas las señales que indiquen una situación de riesgo.

Se deben tomar en cuenta las recomendaciones oficiales sobre el comportamiento de la epidemia y sus efectos a nivel local.

Regresando al concepto original, una propuesta de valor, es una idea clara de cómo tu producto o servicio resuelve los problemas del cliente, mejora su situación, especifica claramente el beneficio o valor y les dice a todos por qué deben elegirte ti y no a la competencia.

Después de la salud, una propuesta de valor está relacionada con la funcionalidad, oportunidad, calidad, precio, la relación con los clientes, plazos de entrega, sensaciones del cliente, experiencia de compra, imagen y prestigio

Frecuentemente los negocios y empresas no ayudan al cliente a ver qué los hace diferentes de sus competidores, en su lugar tratan de ganarse al cliente objetivo con promesas repetidas, palabras comunes y listas de ventajas que todos tienen, es recomendable definir los beneficios que genera nuestra propuesta de valor, poniéndonos siempre en la posición del cliente.

En función del tipo de beneficios, podemos clasificarlos en tres categorías: beneficios de carácter económico, funcional y emocional.

Beneficios de carácter económico, productividad, ahorro de tiempo o recursos, permite al cliente vender más, tener mayor margen, disminuye costos en la adquisición, mantenimiento o ambos.

Beneficios de carácter funcional, es cómodo, adaptable, sencillo y fácil de usar, disponible en todo momento y a través de los canales apropiados.

Beneficios de carácter emocional, se siente bien al comprarlo, debido al prestigio, exclusividad, seguridad y sus consecuencias medioambientales.

Al final de cuentas, los beneficios principales debido a la crisis sanitaria van a estar relacionados con la salud, como ya lo mencionamos, así que el negocio que invente, la mejor forma de proveer su producto o servicio con el máximo de precauciones sanitarias, va a convencer a los clientes para que se acerquen y después, debe cumplir con todas las exigencias normales del mercado.

El autor tiene Maestría en Dirección de Organizaciones.

Actualmente Consultor Empresarial Financiero asociado a PONTIFEX S.C.

manuel_agraz@prodigy.net.mx