La creatividad como método de subsistencia

La autora es Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Sonora.

Mi negocio es una galería de restauración de muebles.

Existe en Hermosillo desde hace ya más de siete años.

En el 2013 estaba en un local por el centro de la ciudad en donde las personas que por ahí pasaban no serían necesariamente mis clientes potenciales, pero me era muy entretenido al principio el estar, digamos, “entrenando” para vender mi concepto.

Entonces sentía que, para una pequeña ciudad en la que nos pasamos el carpintero del vecino o vamos de una decoración según nuestro influjo familiar o amistoso, yo estaba evangelizando con un concepto que se paseaba desde lo hippie hasta lo europeo, pues en Europa estas gracias del bricolaje tenían ya bastante terreno recorrido.

Un día entró un caballero bastante asombrado de haber encontrado mi negocio, ese pequeño rincón de Hermosillo en el que, según sus palabras, ¡éste era un negocio de ciudad grande!

No podía contener su encanto por donde volteaba, colores vivos, efectos avejentados, una silla morada, la estación de radio en una vieja consola estaba de fondo.

Me contó que era arquitecto y le di más sentido a sus afectos por estos conceptos.

Se tocaron muchos temas, entre ellos me quedé con la reflexión de que las personas creativas son las que más le buscan soluciones a la vida. No hablamos de alguien en particular, hablamos simplemente de la creatividad, que se relaciona con el acto de crear.

Vemos que a lo largo de la historia el hombre ha tenido que entender que para los problemas que se le iban presentando tenía que buscar una alternativa, una solución que le permitiera salir adelante, desde su alimentación, buscar opciones para protegerse del clima, revolucionar con ideas que le permitan subsistir y también mejorar esa supervivencia.

Sin crisis no hay desafíos.

¿Qué pasa entonces en tiempos de crisis?, si seguimos volteando a ver la historia y comprobaremos cómo la mente se encarga de realizar nuevas estrategias que lleven al humano a resolver sus desafíos.

Habrá veces que necesitamos afrontar situaciones para salir de la tan mencionada zona de confort en donde no pasaba nada, para llevarnos a nuevas realidades y evolucionar aspectos.

Cuando la cuarentena comenzó, me di cuenta también de la gran necesidad que tenemos de ocuparnos, de crear, de aprender, de entretenernos.

Por solicitud de mis clientes comencé con clases en línea y ellos respondieron a eso mostrando sus avances, solicitando materiales para expresarse en sus nuevas prácticas.

Hay una alumna de la galería que es psicóloga y siempre me ha comentado que no se estima muy buena en esto, pero que su necesidad trabajar sus dos hemisferios y la satisfacción de hacer algo completamente diferente a lo que se dedica la tiene encantada.

A lo largo de las clases sus diseños han prosperado muy encantadoramente.

A lo que voy es que hay tantas maneras de mostrarse creativo y no rendirse, innovar en tu trabajo, aprender un nuevo hobby, poner a prueba tus límites, explorar este lado del hemisferio derecho del cerebro, en donde se encuentra la creatividad, la responsable de todo lo que imaginamos, donde según la teoría de los hemisferios cerebrales, se localizan también los sentimientos: el amor, el miedo.

“En los momentos de crisis, sólo la imaginación es más importante que el conocimiento… Sin crisis no hay desafíos, la vida es una rutina, una lenta agonía… La creatividad nace de la angustia, como el día nace de la noche oscura”, dijo Albert Einstein.

La autora es Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Sonora.

CEO de i Latina Galería

@ilatinagalería