Las mujeres van de compras, los hombres no

El autor es Director de Grössman Beyond Marketing, Consultor en Comunicación y Marketing.

(PRIMERA DE DOS PARTES)

Estimado lector, ¿cuántas decisiones de compra en su hogar, las toma usted?, permítame ser específico, ¿qué decisiones de compra tiene a su cargo?

Hoy querido amigo, le comparto un tema interesante, sobre todo si usted que tiene la amabilidad de leerme, es mujer.

Vea la importancia de la mujer en la economía.

Los números son claros: si las mujeres desempeñaran el mismo rol en el mercado laboral que los hombres (misma tasa de participación, horas de trabajo y cargos ocupados), el PIB global se incrementaría en 28 billones de dólares para el año 2025.

Existe un consenso generalizado entre organismos internacionales en que el empoderamiento de la mujer a través de la inversión en su nivel educativo trae grandes beneficios.

Más allá de una evidente mejora en la productividad de las propias mujeres -que ya generaría un significativo impacto económico-, está demostrado que incrementarían los índices de nutrición y salud infantil, así como el desempeño educativo de los hijos.

Un estudio de la FAO estima que si las mujeres tuvieran acceso a los mismos recursos que los hombres en el sector agrícola (mejores semillas, fertilizantes y fungicidas), podrían aumentar su rendimiento entre un 20% y un 30%.

Dado que las mujeres representan el 43% del total de los agricultores en el mundo, esto conllevaría a un incremento de la producción agrícola de los países en desarrollo entre un 2.5% y un 4%, y reduciría el hambre global entre un 12% y un 17%.

En otras palabras, el empoderamiento de la mujer también está altamente correlacionado con la seguridad alimentaria que afecta aproximadamente a 800 millones de personas en el mundo.

Con toda esta evidencia, no es de extrañar que numerosos estudios muestren que las estrategias enfocadas hacia la equidad de género reportan un mayor crecimiento económico.

De todos modos, y a pesar de la evidencia, a nivel global sólo el 52% de las mujeres participa en el mercado laboral frente al 78% de los hombres; las mujeres realizan el 75% del trabajo no remunerado en el mundo y representan el 70% de la población mundial que se encuentra en situación de extrema pobreza.

Las mujeres controlan cerca del 80% de las decisiones de compra totales en bienes y servicios a nivel global. Usted y yo debemos hacer un mayor esfuerzo si queremos ver algún día a nuestras hijas ocupar un espacio justo y equilibrado.

Según el reciente informe del Banco Mundial “El efecto del poder económico de las mujeres en América Latina y el Caribe”, las mujeres han desempeñado un papel fundamental en la disminución de la pobreza, observando un aumento en las tasas de participación de las mujeres en el mercado laboral en un 15%, y una reducción del 30% en los índices de extrema pobreza.

Respecto del gran impacto económico que la mujer causa al interior de las empresas, se explica por el hecho de que las mujeres controlan cerca del 75% de las decisiones de compra totales en bienes y servicios a nivel global, y esto no es exclusivamente en las categorías tradicionalmente femeninas.

Esto hace que las mujeres cumplan una función extraordinaria al interior de las empresas, pues conocen lo que el consumidor mayoritario desea comprar, así que hoy están involucradas en el diseño, fabricación y comercialización de una amplia gama de bienes y servicios, lo que sin duda agrega valor comercial y genera mayores ganancias.

El autor es Director de Grössman Beyond Marketing, Consultor en Comunicación y Marketing.

manolo@grossman.mx