Coneval, otro órgano autónomo que debemos defender

El autor es presidente de Coparmex Sonora Norte.

El Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (Coneval) es un organismo público descentralizado, dotado de autonomía y capacidad técnica, cuyo objetivo es evaluar los resultados de la política social y la medición de la pobreza en México.

No se trata de un asunto menor, ya que la pobreza ha sido uno de los más sensibles y arraigados problemas en nuestro país.

Desgraciadamente, con gran frecuencia, la política social se ha implementado con el objetivo de obtener una rentabilidad electoral, más que con el objetivo de realmente resolver el problema de la pobreza.

La justificación de la existencia misma del Coneval es que lo que no se mide no se puede mejorar.

Por esto, en los últimos 15 años se ha institucionalizado la medición de la pobreza y la evaluación de los programas sociales, tanto federales como estatales, orientados a dotar a nuestros gobernantes de herramientas para diseñar políticas públicas eficaces, pero también eficientes.

Sin embargo, las señales de alarma se prendieron hace algunos meses cuando el presidente López Obrador decidió relevar de su cargo a Gonzalo Hernández Licona al frente del Consejo.

El relevo se efectuó en el contexto de la crítica que Hernández Licona había externado en torno a los recortes de propuesto para el Coneval, mismos que ponían en grave riesgo su operación.

Ahora, por haberse cumplido su período, fueron renovados tres investigadores académicos que se integrarán al órgano de gobierno y a la comisión ejecutiva del Coneval para el período 2020-2024.

Dado un entorno matizado por la incertidumbre, la desconfianza y la especulación, el proceso fue cercanamente observado por el ojo crítico de integrantes de Coparmex.

Se llevó a cabo un extenso proceso de revisión de los candidatos participantes, con el fin de identificar a los que cuenten con las más altas competencias e independencia.

Finalmente, se hizo un esfuerzo coordinado de gestión a nivel nacional para promover estos perfiles.

El esfuerzo rindió frutos ya que el nombramiento recayó en tres distinguidos académicos que tienen como denominador común su gran solvencia curricular, dos de los cuales había previamente identificado Coparmex entre los que mejor cumplían con estas características.

Lo anterior constituye un buen indicio de que el Coneval seguirá trabajando bajo la premisa de la neutralidad política, tan necesaria en estos tiempos.

Para agosto de 2021, se espera que el Coneval emita los nuevos resultados en medición de la pobreza.

Éstos se compararán con los primeros dos años de la actual administración.

La lectura de los resultados será brutalmente reveladora; sin embargo, no debemos bajar la guardia.

La tentación de intervenir en éste y otros organismos autónomos sigue latente, y los actuales programas enfocados al combate a la pobreza parecen haber sido diseñados bajo la misma perspectiva electoral de siempre.

El autor es presidente de Coparmex Sonora Norte.