Liderazgo: Ser humilde

El autor es ingeniero en Sistemas Electrónicos por el Itesm, catedrático de la misma institución.

(Primera de dos partes)

Hoy en día existe una característica peligrosa y silenciosa que desafortunadamente cada vez es más común identificarla dentro del liderazgo, ¿te imaginas cuál es?

Seguro estás trayendo a tu mente varias como son la pasividad, no trabajar en equipo, no saber hablar en público, dirigir con base en resultados y no cuidar a la gente (tema que compartí en el artículo anterior), entre otras.

Si es así estoy totalmente de acuerdo y existen muchas otras que sin duda deben ser características con las que debe contar un líder, pero hoy quiero referirme al que con gran frecuencia el liderazgo conduce y es a la “arrogancia”.

Cuando tenemos una posición donde somos el foco de la atención general, donde poseemos poder y autoridad, tenemos el riesgo latente de sentir que somos más importantes que los demás.

Y créeme, he visto que la ruina o fracaso personal de quien en algún momento tuvo la oportunidad de dirigir y ser exitoso en un gran porcentaje se inicia con el simple pensamiento de ¡yo soy lo máximo y aquí me deben respetar!

Además hacer lo que digo ¡por ser el jefe!

¿Te suena familiar?

El líder debe ser un modelo a seguir, una fuente de inspiración para todos y quien debe luchar por lograr el bien común de quienes integran la empresa y por supuesto la gente que está a su alrededor en cualquiera que sea su nivel jerárquico o incluso social.

En el deporte, donde ya he compartido por varios años, tuve la oportunidad de trabajar, siempre me ha parecido un excelente espacio donde existen los modelos a seguir y me refiero a deportistas desde infantiles hasta juveniles y por supuesto alto rendimiento, además, claro, entrenadores y directivos Cualquier persona-líder que forma parte de un equipo o grupo deportivo debe comprometerse a en todo momento vivir consciente de esa responsabilidad.

Influenciando de cierta forma, con la esperanza de que su ejemplo pueda tener algún efecto positivo en todos los integrantes…

El líder se puede convertir en una celebridad, pero debe cuidar el que no se le glorifique en aras de engrandecer el propio ego.

De manera recurrente, observo a líderes, empresariales y deportistas, que olvidan manejar esa importante responsabilidad adecuadamente o con inteligencia.

Es decir, no lo emplean en beneficio de los demás. ¡Incluso se enfocan más en un estatus de ser importantes por la posición, el dinero, el poder y un bien meramente individua! “La humildad es el sólido fundamento de todas las virtudes…”

Confucio