Tiempos difíciles para la lucha contra el cambio climático

Es ingeniero bioquímico con especialidad en Ciencias Marinas Alimentarias por el Tec de Monterrey.

Noviembre ha sido complicado en la lucha contra el cambio climático. Primero la cancelación de la organización de la COP 25 en Chile y después la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París.

Tras las protestas en Chile, su presidente Sebastián Piñera canceló la COP25 y el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico, quizá en un intento por zafarse de la atención mundial.

Sin embargo, el presidente español, Pedro Sánchez, ofreció Madrid como sede.

La cancelación de la cumbre era un gran inconveniente ya que es la última reunión previa a la entrada en vigor del Acuerdo de París de 2020 en Reino Unido.

Organizar la cumbre en un mes es un gran reto y un riesgo.

Un encuentro Internacional requiere la participación de todos los países y en especial de los más vulnerables que necesitan de apoyo económico y logístico para desplazarse.

Nos acercamos a una cumbre más cosmética que real, por el escaso tiempo de planeación, la falta de acuerdo en los mercados de emisiones, el desinterés de los países y la incógnita en la operatividad del Fondo Verde del Clima, éstos son los obstáculos para la entrada en vigor del Acuerdo de París y su efectividad para frenar la emergencia climática.

El anuncio de Trump de retirarse del Acuerdo de París en 2020, deja entrever el desinterés por afrontar la emergencia climática global, pese a que su país ha sido en gran medida el gestor de la crisis.

El apoyo global al Acuerdo de París, ratificado por 187 países, marca el interés Internacional en la lucha contra el cambio climático.

El mundo lamenta la decisión de EU de retirarse del Acuerdo de París y le exhorta que reconsidere lo antes posible para que contribuya en la transición hacia una economía global baja en emisiones.

La evidencia científica y la frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos alertan que el cambio climático, debido a causas antropogénicas, está ocurriendo, y que es urgente tomar acciones colectivas para enfrentarla.

El Acuerdo de París es un triunfo del multilateralismo y una respuesta al cambio climático.

Es fundamental la implementación rápida de su contenido y lograr que los compromisos sean mayores.

La COP25 de Madrid es la oportunidad de aumentar las acciones ecológicas en los países.

Vemos cómo la ciudadanía a nivel global, exige mayor compromiso de los países en políticas climáticas más ambiciosas, para reducir emisiones y enfrentar las consecuencias adversas del cambio climático.

Apenas queda tiempo.

Necesitamos que se oiga a la sociedad, a la juventud, poblaciones indígenas que sufren las consecuencias del cambio climático y de las mujeres que cumplen un rol fundamental en la lucha climática.

Es fundamental para el bienestar de la sociedad global y de toda la vida en el planeta.