Mujeres están hartas de la impunidad

Mujeres están hartas de la impunidad, escribe José Santiago Healy en #Actitudes

Lo que debería ser una celebración entusiasta y pacífica, el Día Internacional de la Mujer se ha convertido en México en un suceso de protestas, agresiones físicas y vandalismo contra edificios públicos y privados.

Lo anterior a pesar de que la presencia de la mujer en la vida pública y social de nuestro país ha ido en constante aumento. Hoy tenemos más senadoras que senadores, las mujeres ocupan 65

escaños contra 63 de los hombres.

En la Cámara de Diputados el 48.2 por ciento de las curules corresponden al sector femenino, muy cerca del 50 por ciento lo que años atrás resultaría imposible. En el gobierno federal nueve

mujeres son secretarias de estado contra diez secretarios varones. Entre las más destacadas figuran Delfina Gómez en Educación, Olga Sánchez Cordero en Gobernación, Rosa Icela Rodríguez en Seguridad y Tatiana Clouthier en Economía.

Sin embargo, existen cargos que todavía son ampliamente dominados por hombres como es el caso de las gubernaturas. En el país solo hay dos gobernadoras: Claudia Pavlovich de Sonora y Claudia Sheinbaum de la Ciudad de México. De no haber fallecido Martha Erika Alonso en un accidente aéreo en el 2018, sería gobernadora por el estado de Puebla.

En Sonora también los avances son notorios: además de una mujer como titular del Poder Ejecutivo existen 26 alcaldesas de un total de 72 municipios, varias de ellas de ciudades importantes como Célida López de Hermosillo, Sara Valle de Guaymas y María del Rosario Quintero de Navojoa.

A esto hay que agregar catorce diputadas locales de un total de 33 curules en el Congreso de Sonora. Pero poco o nada ha valido lo anterior ante el despiadado incremento de la violencia contra las

mujeres en todo el país en diversas modalidades y para colmo ha venido impregnado de una pavorosa impunidad.

El sentir ciudadano es general: cada vez que se agrede, se abusa sexualmente o se asesina a una mujer por razones de género, la posibilidad de que el delito sea castigado es bajísimo.

En el 2020 se cometieron en México 3,752 asesinatos de mujeres de los cuáles el 44 por ciento se concentró en cinco entidades: Guanajuato, Estado de México, Chihuahua, Baja California y Jalisco. María de la Luz Estrada, titular del Observatorio Ciudadano del Feminicidio, denuncia que existe “una cadena de impunidad, deficiencia en las fiscalías, hay corrupción, hay inacción, hay una negligencia tremenda”.

Aquí en Sonora ayer despertamos con la noticia del hallazgo del cadáver de Cecilia Yépiz Reyna, ex funcionaria municipal de Nogales y quien desapareció el pasado 5 de enero. Hasta el momento no sabemos quien o quienes dieron cuenta de su vida.

Por lo anterior resulta hasta cierto punto explicable el porqué la furia y la desesperación de grupos de mujeres que en los últimos años han protestado en el Día Internacional de la Mujer con acciones violentas y radicales.

Este año el gobierno de López Obrador optó por colocar vallas e  impedir en lo posible las marchas feministas, pero no vimos por ningún lado un intento serio para atender a las mujeres y encontrar algún punto de diálogo.

Por el contrario, el régimen morenista se empecina en postular como candidato al gobierno de Guerrero a un político acusado de abuso sexual. Con grandes letras, los grupos feministas proyectaron en Palacio Nacional este mensaje: “Un violador no será gobernador”.

López Obrador acusó a sectores de derecha de respaldar las protestas feministas radicales. Pero el primer mandatario no ofreció nombres ni evidencias. Queda indudablemente un largo camino por recorrer para ofrecer a la mujer mexicana mayores oportunidades para su desarrollo humano, social y profesional.

El sistema mexicano debe a su vez poner un alto inmediato a las agresiones y la mejor vía será aplicar la ley con toda la fuerza a quienes atenten contra las mujeres. Hay que volver a la frase que nos enseñaron nuestros padres y abuelos: “a la mujer no se le toca ni con el pétalo de una rosa”.

Desde el fondo de nuestro corazón felicitamos a tantas mujeres valientes, inteligentes, estudiosas y entregadas que tenemos en Sonora y en México, muy en especial a aquellas esposas y madres que logran armonizar una sólida familia con un trabajo profesional.

Noticia final…

Aquí en Hermosillo varios cientos de mujeres, la mayoría jóvenes y algunas con niños en brazos, salieron a protestar de manera pacífica aunque ruidosa por las principales avenidas hasta llegar a la escalinata del Museo de la Universidad.

“Vivas se las llevaron, vivas las queremos”, “Ni una más, ni una más, ni una asesinada más”, fueron algunas de las consignas coreadas por las féminas.