Honor a destacados sonorenses

Honor a destacados sonorenses, escribe @joseshealy en #Actitudes.

En los últimos días fallecieron varios personajes sonorenses a quienes dedicamos hoy este artículo en reconocimiento a sus trayectorias y a sus aportaciones a nuestra comunidad.

El sábado en Ciudad Obregón se despidió de sus familiares y amigos don Francisco Schwarzbeck Ramírez a sus 97 años de edad, fue un sólido pilar y motor de la sociedad cajemense.

Hijo del inmigrante alemán Hugo Schwarzbeck Henkel, don Pancho participó en la agricultura, ganadería, comercio e industria y estuvo siempre atento al devenir social y político de la región.

Con mucha frecuencia acudimos a él para conocer al detalle los problemas locales, sus puntos de vista firmes y objetivos eran siempre muy apreciados por sus amigos cercanos.

Incursionó en el servicio público como regidor del Ayuntamiento de Cajeme y participó en infinidad de instituciones locales como la Cruz Roja, el Itson y el Tec de Monterrey, además de asociaciones agrícolas y ganaderas.

Con su primera esposa doña Bertha Noriega procreó siete hijos a quienes lograron transmitir valores sólidos y una educación de primera.

Ellos son Francisco (finado), Arturo, Humberto, Alfredo, Bertha Mercedes, Martha y Margarita.

Años más tarde contrajo nupcias con la señora Lourdes Torres, quien lo acompañó fielmente hasta el último minuto de su vida.

Ambos educaron con especial dedicación a sus nietos Francisco y Daniel luego de que su hijo Pancho y su esposa Mirna fallecieran en un trágico accidente hace ya muchos años.

Además de una ejemplar familia, don Pancho deja como legado su valiosa contribución a organismos que hoy son el cimiento de la progresista Cajeme.

En Hermosillo, el jueves pasado dejó de existir el CP Rodrigo Sotomayor Elías a los 79 años de edad y luego de haber realizado una sólida carrera en el ramo de la asesoría contable y financiera.

Conocimos a don Rodrigo hace varias décadas en su calidad de consejero en la empresa donde participó durante casi cincuenta años, desde entonces aprendimos a valorar sus atinados consejos, siempre constructivos.

Fue asesor de infinidad de empresas e instituciones regionales, dejando huella por su profesionalismo y lealtad.

Hace unas semanas tuvimos una última charla telefónica, a pesar de sus quebrantos de salud Rodrigo lucía optimista y alegre.

Su sentido del humor lo acompañó siempre así como su sabiduría popular.

“En tiempos de crisis hay que estar juntos como los conejos, así podremos acompañarnos y salir adelante”, solía decir con su habitual sonrisa.

Dejó en manos de su hijo Rodrigo su despacho contable al que le dedicó toda su vida profesional logrando asociarse con firmas internacionales de enorme prestigio.

Muchas empresas regionales le deben el éxito y otras más recuerdan sus valiosas directrices; que en paz descanse el buen amigo Rodrigo.

Arnoldo Moreno Camou, ejecutivo y empresario de altos vuelos, falleció la semana pasada a los 83 años en Hermosillo, luego de padecer un larga enfermedad.

Arnoldo fue de los promotores del fraccionamiento Villa Satélite que en su tiempo transformó urbanamente a Hermosillo, dirigió además la empresa Comercial VH cuando se constituyó en la cadena de supermercados más exitosa de la región.

Años más tarde fue el primer director del desarrollo Los Lagos, proyecto residencial y deportivo que ha sido ejemplo en el noroeste de México.

Un padecimiento de Alzheimer lo asaltó cuando todavía le quedaban muchos años de actividad profesional.

Su esposa y sus hijos lo recordarán siempre como un leal y dedicado esposo y padre, además de un ejemplo en su vida empresarial.

Tres personajes que hicieron lo suyo en distintos tiempos, espacios y áreas profesionales, pero unidos en un mismo objetivo: dar lo mejor de sí mismos.

Ignoran a Susana Distancia

Ahora entendemos por qué la pandemia no cede en México.

Ayer viajamos de Tijuana a Hermosillo y cual fue nuestra sorpresa el encontrar un aeropuerto saturado de viajeros.

Tanto al documentar como al cruzar el filtro de seguridad las aglomeraciones son espantosas y claro, nadie respeta la sana distancia y cada quien usa el cubrebocas a su libre criterio.

Si no te contagias de coronavirus terminas por asfixiarte.

En el vuelo de Volaris que abordamos no se guardó distancia entre los pasajeros y menos en la parte trasera donde no se cobra por asiento.

¿Estará enterado el subsecretario Hugo López-Gatell de tan desastrosa situación?