Cero y van cuatro semanas de la tragedia LeBarón

Ayer se cumplieron cuatro semanas del salvaje ataque contra mujeres y niños de la familia LeBarón en el lejano municipio de Bavispe sin que hasta el momento conozcamos con certeza el móvil y la identidad de los agresores.

Ayer se cumplieron cuatro semanas del salvaje ataque contra mujeres y niños de la familia LeBarón en el lejano municipio de Bavispe sin que hasta el momento conozcamos con certeza el móvil y la identidad de los agresores.

Alrededor de doce sujetos descargaron sus largas y potentes armas contra tres mujeres y catorce de sus pequeños hijos, entre ellos dos gemelos de ocho meses que ahí fallecieron y un bebé de siete meses que milagrosamente se salvó de la balas asesinas.

Las tres mujeres y seis de sus descendientes murieron en la emboscada que incluyó la quema de una de las tres camionetas en las que viajaban las víctimas.

Los LeBaron integran una comunidad de una rama de la religión mormona de aproximadamente cinco mil miembros que está asentada en poblados de las sierra colindante entre Chihuahua y Sonora.

Esta familia se separó de su iglesia de Estados Unidos y fundaron en 1955 la Iglesia del Primogénito de la Plenitud de los Tiempos para establecerse en el municipio de Galeana, en Chihuahua, en la llamada Colonia LeBarón.

Desde entonces se han dedicado exitosamente a labores agrícolas, ganaderas y comerciales, entre otras.

La mayoría de ellos cuentan con doble nacionalidad —la mexicana y la norteamericana— y en los últimos años algunos de sus dirigentes han incursionado en la política tanto en Chihuahua como a nivel nacional.

Han pasado por momentos muy complejos como fue la división de la comunidad entre los dos hermanos líderes Ervil y Joel LeBarón que derivó en el crimen del segundo por parte de Ervil, quien fue condenado por tal hecho en México en 1974.

Años después —en mayo del 2009– Erik LeBarón de 17 años de edad fue secuestrado y por su rescate los criminales solicitaron un millón de dólares.

Benjamín LeBaron, entonces dirigente de la comunidad, acordó con sus seguidores no pagar un sólo dólar por el rescate y luchar por la liberación de Erik.

Se logró el cometido semanas después ante la presión ejercida a nivel social y de las autoridades, no obstante días más tarde Benjamín y su cuñado Luis Widmar fueron levantados y posteriormente ejecutados por la delincuencia organizada.

Sin embargo, nunca hasta ahora la comunidad LeBarón había sido víctima de una agresión tan sangrienta y cobarde por parte de supuestos grupos del narcotráfico.

En un inicio las autoridades federales hablaron de fuego cruzado entre dos bandas de criminales, después cambiaron la versión a una posible confusión, pero ambos supuestos cayeron por su propio peso ante la contundencia y precisión del ataque.

¿Qué motivos pueden llevar a un grupo criminal para ejecutar a tres mujeres y seis menores indefensos y totalmente inocentes? ¿Fue realmente alguna venganza contra la comunidad LeBarón por motivos hasta el momento no conocidos?

¿O será una dura advertencia contras las autoridades federales para que no persigan a los capos de la mafia y evitar su posterior extradición a los Estados Unidos como estuvo a punto de ocurrir con Ovidio Guzmán en el llamado “culiacanazo”?

Sea lo que sea es por demás trascendente y necesario que se aclare este incidente y en su momento se castigue a los responsables de la salvaje masacre.

Las autoridades federales prácticamente desde un inicio se lavaron las manos y dejaron el caso en la Fiscalía del Estado de Sonora que evidentemente no cuenta con los recursos y la fuerza para llegar hasta el fondo de la investigación.

Posteriormente se permitió la intervención de agentes del FBI que estuvieron muy poco tiempo en Sonora y que al momento no se conoce ningún avance de sus pesquisas.

El secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo Montaño, declaró semanas atrás que había varios detenidos por el incidente, pero tampoco se ha confirmado tal supuesto.

El presidente López Obrador ha permanecido prácticamente al margen de la tragedia, no acudió a los funerales de las víctimas ni se ha involucrado a fondo en las pesquisas.

Recibirá a un contingente de la familia LeBarón el próximo 2 de diciembre en Palacio Nacional en lo que parece ser más un acto humanitario pero no una acción en búsqueda de justicia.

Da tristeza pensarlo, pero esperamos que la tragedia de Bavispe no se convierta en otros hecho más impune como tantos otros han ocurrido y siguen ocurriendo en nuestro México.

Noticias, noticias...

Son once mil los empleos que se crearon en Sonora durante el pasado mes de octubre lo que confirma la tendencia positiva en este importante rubro a pesar de que a nivel nacional los nubarrones están por todos lados. El gobierno de Claudia Pavlovich no debe echar las campanas a vuelo porque se avecinan tiempos complejos por las políticas inciertas del gobierno federal además de que el país no ha crecido a lo largo del 2019. La estrategia deberá enfocarse al mercado de exportación en donde Sonora es líder en muchas ramas de la industria de transformación, de la minería, agricultura, pesca y ganadería.