Congelado, el camarón se conserva mejor

Conservar adecuadamente el producto de mar le permitirá guardarlo por más tiempo sin perder su delicioso sabor.

HERMOSILLO, SON.- Para que los alimentos perduren con sus propiedades y en su mejor estado, es necesario mantener su temperatura adecuada de preservación, en el caso de los productos cárnicos, como el camarón, a esta característica se le conoce como cadena fría, ya que las temperaturas para que el alimento se conserve sano son bajas y se deben mantener así desde su producción hasta su preparación.

Juan Carlos Ramírez Suárez, investigador titular del Laboratorio de Química y Calidad en Producto Pesquero del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), indicó que de no seguir el proceso, el producto pierde sus propiedades nutrimentales y puede ocasionar intoxicaciones si se consume alimento mal cuidado.

“La cadena de frío aplica para cualquier producto, se necesita congelar o refrigerar, y simplemente consiste en que cada parte de su proceso, ya sea producción, almacenaje o transporte, en todos los eslabones que hay durante la producción de algún producto, es mantener la temperatura adecuada para conservarlo y que perdure, además de garantizar la calidad del mismo”, explicó.

En el caso de los productos provenientes del océano, como el pescado, camarón, moluscos, entre otros, la temperatura se procura desde que se extrae del mar.

CONGELADO SE CONSERVA MÁS TIEMPO

Gracias a los avances en acondicionamiento de la temperatura, hoy en día las cadenas de suministro tienen la posibilidad de conservar el producto en las temperaturas adecuadas en todo momento, no obstante, la posibilidad de congelar el producto, permite conservarlo de manera segura durante más tiempo.

“Una congelación óptima puede tener una duración de hasta un año”, agregó el especialista.

La congelación ocasiona que el deterioro de la calidad sea más lento, por ello se recomienda tener un excelente manejo de la temperatura fría, la cual, si es realizada por una industria procesadora, congelan el producto hasta a -18 grados centígrados, la misma temperatura que se manejan las granjas acuícolas.

“Entre las propiedades sensoriales que debe mantener, en este caso el camarón, giran en torno a su color, olor, sabor y textura, pues ‘uno se enamora al ver el producto’; al verlo, debe ser azul si está crudo, o rosa si está precocido. Su olor debe ser fresco, y la textura debe ser firme y sin baba, de lo contrario, ya está perdido”, dijo el especialista.

PARA DESCONGELARLO

Ahora una vez mantenida la cadena de frío, Ramírez añadió para descongelarlo es mejor hacerlo poco a poco y no dejarlo a la temperatura ambiente, pues en el caso del estado de Sonora, las altas temperaturas pueden ocasionar un mal derretimiento.

Para hacerlo de la mejor forma, lo recomendable es bajarlo del congelador al refrigerador una noche antes de cocinarlo, para que se le de tiempo y paciencia al proceso; detalló el investigador que se acostumbra a ponerlo bajo agua para hacer este paso, y es óptimo, siempre y cuando sea agua fría.

¿ES SEGURO GUARDARLO EN CASA?

Desde su producción, almacenamiento, distribución y exhibición en pescaderías y supermercados se pueden ver equipos de congelación y refrigeración que mantienen al producto en su temperatura ideal, pero ¿los refrigeradores y congeladores que tenemos en casa también cumplen con las indicaciones?

La respuesta es sí, siempre y cuando se emplee refrigerador o congelador, según sea el caso, así mismo se aconseja introducir los alimentos fríos cuanto antes, después de haber hecho las compras.

Se recomienda tener el congelador en al menos -2°C, y estar al pendiente de su mantenimiento, limpiarlo periódicamente para evitar que genere escarcha y asegurarnos que esté congelando (lo que es indicador de que la temperatura se está alcanzando).

Para el refrigerador, se debe conservar entre 2 y 4 °C de temperatura, aunque por su constante uso hay zonas más frías que otras en su interior, se recomienda conservar los mariscos en la parte más fría, constantemente localizada en la parte posterior, cerca de las rejillas de ventilación.