Tras la muerte de su esposo bombero, Beatriz se unió a la corporación para mantener a sus hijas
Inspirada por el amor que su finado esposo le tenía a su trabajo en Bomberos de Obregón, Beatriz Adriana Gómez siguió sus pasos y desde hace 7 años se desempeña como radio operadora de ahí.
CIUDAD OBREGÓN, SON.- Inspirada por el amor y respeto que su finado esposo le tenía a su trabajo en Bomberos de Ciudad Obregón, Beatriz Adriana Gómez siguió sus pasos y desde hace 7 años se desempeña como radio operadora en la corporación, luego de que en el 2015, el cáncer de colon le arrebatara a su compañero de vida y la dejara sola al cuidado de sus dos hijas; con el luto a cuestas Betty sacó adelante a su familia, por lo que en este Día de las Madres su historia merece ser contada.
Fue en el 2011 cuando la idea de formar parte de Bomberos se metió en su cabeza, esto gracias al amor “a la camiseta” que siempre vio en su esposo, el oficial de bomberos, Héctor Raúl Téllez Otero, pese a que este se negaba a que ingresara a las filas de la corporación por considerar más importante que estuviera al pendiente de sus hijas, pues sabía de lo absorbente que es la profesión que los mantendría ausentes de casa.
“Mi motivación fue por él y mi hija, porque ella me pidió que fuera bombero. Mi esposo ya tenía mucho aquí trabajando en bomberos. Él fue voluntario desde muy joven. Tenía una pasión por bomberos, le fascinaba, él estaba enamorado de bomberos. En el 2011 empecé a venir de voluntaria, él no quería que entrara a la academia porque no quería que descuidara a las niñas”, agregó la bombero de 42 años.
Pese a la negación de su esposo, Betty sintió el llamado a ayudar a las personas que atraviesan por situaciones adversas y luego de muchas pláticas entre ambos, y la ayuda de su menor hija Evelyn, quien de tan solo 7 años pidió hablar con el coordinador de la academia para que hiciera entrar en razón a su padre y permitiera que su mamá se convirtiera en una gran bombero como él, en el 2012 concluyó la academia de bomberos.
Un ángel las cuida
Tan solo dos años después, en el 2014, al oficial le detectaron cáncer de colon, situación que la llevó a decidir entre su profesión que recién iniciaba y la salud de su marido, por lo que, sin pensarla, Betty prefirió cuidarlo a él y a sus hijas y se mantuvo al cuidado de su esposo las 24 horas del día durante un año, pues en el 2015, desafortunadamente perdió la batalla contra la enfermedad.
“Sí estaba cansada pero yo le pedía a Dios que me lo sanara que yo siempre iba a estar al pendiente de él, ya no importaba mi trabajo en bomberos. Que lo aliviara, que le devolviera la salud era lo único que le pedía a Dios, porque él siempre fue muy activo, él daba cursos y fue buzo bombero. Su muerte fue algo muy doloroso, es algo que se vive muy feo y es algo que me dan ganas de llorar todavía porque no lo supero todavía muy bien, entonces sí es algo muy triste y desgastante mental y emocionalmente”, confesó.
Luego de un matrimonio de más de 17 años y con dos hijas de 15 y 10 años, Beatriz necesitaba conseguir un trabajo para mantener a sus hijas, pues ya no podía seguir siendo ama de casa tal y como su esposo quería. En un momento en que su cabeza se encontraba sumergida en la tristeza y las preocupaciones, como si un ángel le hubiera mandado una bendición, tan solo 10 días después de la muerte de su marido, una propuesta de trabajo como radio operadora le llegó por parte del comandante de la corporación.
“Entrar como radio operadora me ayudó a salir adelante, a que no fuera tanto el dolor de la pérdida, atender a las personas me ayudó a entretenerme en el trabajo. Aun me da tristeza escuchar las sirenas, salir y que él no esté aquí. Fue muy doloroso para mí entrar tan rápido a trabajar y más en el ambiente en el que él trabajaba. Fue doloroso pero poco a poco fui saliendo adelante con la ayuda de mis hijas”, compartió conmovida.
“Ya va la ayuda en camino”
Tal y como alguna vez lo soñó, en la actualidad Beatriz brinda el apoyo a las personas que llaman solicitando un servicio de bomberos, quienes en muchos casos se encuentran desesperados, por lo que trata siempre de atenderlos con una actitud comprensiva y bondadosa.
La radio operadora aseguró que no basta solo con tomar los datos y pasarlos a sus compañeros para que asistan al servicio, si no que, en muchas ocasiones, las personas buscan una palabra reconfortante que los calme ante las situaciones adversas.
“Me gusta mucho estar aquí, me gusta mucho contestar las llamadas, poder ayudar a las personas y resolverles los problemas. A veces no basta con decir: ‘Ya va la ayuda en camino’. Ha habido casos en que a veces uno tiene que guardar la calma eso es para recopilar más información para guiar mejor a la unidad y llegue a tiempo al incidente”, agregó.
Dar palabras de apoyo mientras los usuarios esperan que bomberos llegue a cubrir el siniestro es una de las cosas que mas disfruta realizar, pues su sentido de la solidaridad la hace entender la situación que en ese momento afrontan los involucrados.
Recordó que en alguna ocasión, al atender una llamada una madre angustiada por el problema de adicción que tenía su hijo, se desahogó con ella, luego de que el joven solicitara una unidad sin que fuera cierto.
“Le di palabras de aliento, le dije que si ocupaba el apoyo, podía buscar ayuda. Le dije que hablara conmigo y empezó a desahogarse y empezó a llorar, tenía muchas ganas de llorar yo también, siento le ayude un poquito”, dijo.
Amor con amor se paga
Betty está convencida de que el amor por ayudar a los demás que le dejó su finado esposo, hoy por hoy está latente en sus dos hijas Leslie de los Ángeles y Evelyn Beatriz, esta última convencida de que quiere ingresar a la academia de bomberos cuando termine la preparatoria.
Con turnos de 24 horas, tuvo que ausentarse en muchos momentos importantes en la vida de sus menores hijas, quienes en algún momento llegaron a reclamarle su ausencia, sin embargo, espera que si deciden dedicarse a esta hermosa labor, será cuestión de tiempo para que entiendan los esfuerzos que hicieron sus padres para verlas crecer sin que nada les faltara.
A lado de sus dos hijas y sus nietas, Beatriz celebrará este próximo Día de las Madres, que por azares del destino le tocó descansar, sino, la radio operadora estuviera sirviendo en el Departamento de Bomberos durante todo el día a pesar de la celebración.