Taxistas de Guaymas trabajan en riesgo por pasajeros imprudentes o delincuencia organizada

El señor Eleazar labora como operador de taxi en Guaymas, y a raíz de una mala experiencia decidió dejar de trabajar por las noches.

GUAYMAS, SON.- El señor Eleazar labora como operador de taxi en Guaymas, y a raíz de una mala experiencia decidió dejar de trabajar por las noches, y aunque dice que el gremio sí es apoyado por el Sindicato de Operadores de Transporte y por las autoridades, los mismos trabajadores deben tomar sus precauciones ante la violencia que se vive en la región.

"Yo ya no trabajo de noche, sufrí una situación y ya no quise volver a trabajar de noche, nunca reporté nada, solo dejé de trabajar y ahora puro de día, aunque de día también hay riesgo. Aquella vez se subieron al carro armados y me dijeron: dale, no me pasó nada, los llevé para el lado de Las Golondrinas y ahí se bajaron, pero ¿que tal si me hubiera pasado algo?", relató.

Desaparición de una joven en Guaymas

En días pasados, la central de taxis a la que pertenece estuvo señalada de un delito grave, después de que uno de los operadores dio servicio a una jóven de 18 años de edad que pidió bajarse en una zona oscura y posteriormente ella perdió contacto con sus familiares por varias horas y, a pesar de que la central tenía pruebas de que el operador no estaba involucrado en la desaparición, el padre de la joven fue a amenazarlos, robó el automóvil de quien él creía culpable y lo abandonó en un terreno baldío sin batería.

Horas más tarde la mujer apareció a salvo, pero no se dio a conocer públicamente que había ocurrido con ella.

La comunidad molesta pedía una explicación a la familia a fin de deslindar al taxista, la central aseguró que demandará por daños y amenazas y el gremio se encuentra molesto porque esta situación de miedo (posiblemente derivado del caso de Debhani Escobar en el estado de Nuevo León) termina poniendo en duda la ética de todos los taxistas.

"Sí me enteré de eso que pasó, a cualquier compañero le puede pasar. Ahí no tuvo nada que ver el taxista sino que la persona iba para un lado y no llegó y se bajó en otra parte, no era culpa del taxi, cuando piden que los dejemos en lugares oscuros uno dice: ¿aquí se va a quedar? pero es decisión dejarlos donde ellos quieran, si es un lugar oscuro y solo se nos hace raro pero no podemos decirles nada, es decisión de ellos, el problema es que si les pasa algo se van contra el último que la movió", dijo Eleazar.

Los taxistas de Guaymas han descartado realizar manifestaciones fuertes sobre ese caso, en virtud de que la empresa lo enfrentará por la vía legal, pero la mañana de este domingo 1 de mayo, en el último contingente del desfile conmemorativo al Día del Trabajo, circularon automóviles de la central señalada en apoyo a todos los operadores que laboran expuestos a riesgos provocados por pasajeros imprudentes o la delincuencia organizada.

Taxistas deciden a quién subir y a quién no

Álvaro Guardado Valenzuela, líder del Sindicato Único de Operadores de Transporte, señaló que, con la escalada de delitos de alto impacto, los choferes se han vuelto mucho más cautelosos al decidir a qué personas suben o no, y valoran el aspecto que tengan, no obstante, en el caso ocurrido con la jovencita no imaginaron que ella fuera un pasaje que terminaría en señalamiento de secuestro, y comentó que "si el chofer no hubiera corrido lo hubieran medio matado", el día que el padre de la muchacha fue a reclamar violentamente en las oficinas de la central ubicada en el sector Las Colinas.

"Fue injustamente señalado, el secuestro por parte del taxista nunca fue cierto, lo malo de aquí es que nosotros estamos en riesgo constante porque este es un servicio público, la integridad del usuario es cuando abordas el vehículo, cuando ya bajaron del carro no es responsabilidad nuestra, confundieron las cosas estas gentes, agredieron las oficinas, hubo delitos de alto impacto, amenazas de muerte y tuvimos que pedir apoyo de la Fiscalía y no vamos a parar, porque no es posible que este gremio está trabajando lícitamente y de repente los amenacen de muerte", dijo.

Amenazas anteriores a taxistas

Cabe mencionar que en enero de 2021, amagados por presuntos delincuentes, los taxistas de todas las centrales de Guaymas y Empalme se vieron obligados a retirar los polarizados de los vidrios de las unidades, y uno de ellos terminó con una fuerte crisis nerviosa cuando los pasajeros (hombre y mujer) lo obligaron a conducir hasta un lugar alejado, lo asaltaron e incendiaron su taxi con la advertencia de que "tenía los cristales polarizados".