Así cambió la vida de Fernando Orta; vivía en las calles de Ciudad Obregón
Hace un año, recordó, don Fernando se encontró en las calles del municipio y nuevamente lo llevaron a un asilo de Mexicali, donde tiempo después se escapó y regresó a Ciudad Obregón.
Con deshidratación, desnutrición y sin poder caminar por la debilidad, fue encontrado el señor Fernando Orta viviendo en las calles de Ciudad Obregón, pero en cuestión de días su vida cambió por completo, ya que ahora cuenta con vestimenta, alimento y sobre todo un techo donde vivir.
Recientemente, el DIF Cajeme envió a don Fernando a un centro de atención para adultos mayores en Mexicali, Baja California, de donde es originario, con el fin de que tenga las atenciones necesarias ante sus condiciones de salud.
El coordinador del programa de atención a personas en situación de calle de DIF Cajeme, Alberto Encinas Vivían, comentó que el adulto mayor tenía más de dos años en Ciudad Obregón, donde incluso ya se le había brindado apoyo.
“Hace dos años y medio aproximadamente, deambulaba alrededor de la Laguna del Náinari, en esa ocacion encontramos familiares de él en Mexicali, pero al estar impuesto a andar en la calle regresó a nuestra ciudad nuevamente en donde las personas le daban dinero, alimentos y también él compraba alcohol para tomárselo”, explicó.
Hace un año, recordó, don Fernando se encontró en las calles del municipio y nuevamente lo llevaron a un asilo de Mexicali, donde tiempo después se escapó y regresó a Ciudad Obregón.
Lo encontraron en paso a desnivel
En días pasados el adulto mayor se encontró en las vías del tres a la altura del paso a desnivel de la calle No Reelección, pero su estado de salud era grave, ya que ni siquiera podía caminar.
“Lo encontré en condiciones más desfavorables de nutrición, hidratación y ya sin poder caminar, esto último por estar tanto tiempo acostado, el frío y la debilidad. En esta ocasión le ofrecimos nuevamente la ayuda y esta vez la aceptó más convencido de recibirla”, precisó.
El abuelito fue enviado una vez más a su ciudad de origen, pero ahora con la tranquilidad de que está siendo atendido, ya que las condiciones en las que vivía como indigente eran muy malas para su salud.
Cabe señalar que don Fernando cuenta con familiares en Baja California, sin embargo, cuando tuvieron contacto con el señor no lograron mantener una buena relación, es por ello que en esta ocasión se buscó un asilo para albergarlo.