Sismo es una coincidencia

Considera Gómez Valencia que es mera casualidad que haya ocurrido otro temblor en un 19 de septiembre.

Los roces constantes entre placas tectónicas que confluyen en el sur de México es un factor preponderante para la ocurrencia de sismos en la región del Valle de México, consideró Alejandra Maricela Gómez Valencia, maestra del Departamento de Ingeniería Civil y Minas de la Universidad de Sonora.

La docente universitaria consideró como una mera coincidencia que una vez más se haya presentado un terremoto en un día 19 de septiembre, pues no existen argumentos científicos que asocian el movimiento de rotación y traslación natural de la Tierra con la ocurrencia de sismos en México durante este mes.

“Lo que sucede es que la región sur de México colinda con tres placas tectónicas, principalmente la que ha afectado en su mayoría con sismos tan alarmantes, es la placa de cocos, que se subcruza por debajo de la placa norteamericana que es donde está la mayoría de lo que es el territorio mexicano, entonces en este sector a diario ocurren sismos de diferentes magnitudes, sin embargo, a veces, cuando hay alguna fractura o algún movimiento de fallamiento mayor ocurren epicentros de esta magnitud de 7.4 que fue lo que estimó el Sismológico Nacional”.

MERA CASUALIDAD

Respecto a la presencia de sismos en un día 19 de septiembre, tal y como ha ocurrido en 2017 y 1985, dijo que se trata de una mera casualidad, pues no hay elementos científicos que los asocien a esta fecha simbólica.

“Esto de que haya ocurrido en un 19 de septiembre y precisamente posterior a un simulacro, es mera casualidad, como también se ha mencionado en otros 19 de septiembre, sostuvo.

En este caso, indicó que los sismos en esa región del país y si se consultan los monitoreos del Servicio Sismológico Nacional, ocurren a diario.

“Realmente es una casualidad, pues si nos pusiéramos que es una regla que cada 19 de septiembre de cada año, esto ni siquiera es ciclo, ya que el último de esta magnitud fue en septiembre del 2017 y de ese periodo para atrás, fueron 32 años atrás, en 1985, y si nos regresamos en el tiempo, son 50 años hasta 1932”, apuntó.

COINCIDE CALMUS 

Por su parte, el doctor en Geología de la Universidad de París e investigador del Instituto de Geología de la UNAM, Thierry Calmus, coincidió en señalar que la ocurrencia de sismos en un día 19 de septiembre es una mera coincidencia.

“Es una zona sismológica, y pues casualmente ocurrió un sismo de magnitud notable, otra vez un 19 de septiembre, de hecho una hora y 25 minutos después, hubo una réplica en los límites de Colima y Michoacán, entonces, es una coincidencia; por supuesto que suena un poco raro porque ocurre un 19 de septiembre, pero es una coincidencia, no tenemos que buscar otra razón sobrenatural”, recalcó.