¿Cómo sobrevivir a la temida "Cuesta de Enero"? Te dejamos unos consejos

Algunos otros definen a la "Cuesta de Enero" como el fenómeno resultante del mal manejo de las finanzas personales y el incremento en el costo de productos y servicios, que coinciden con el inicio de un nuevo año.

Los festejos de Navidad y Año Nuevo se caracterizan por un incremento en el ánimo de las personas de aumentar su ritmo de compras, ya que para adquirir objetos para uso y goce propio, o bien para los obsequios, llegan al grado de adquirir un gran endeudamiento.

Es a partir del mes de enero que esta aventura compradora puede resentirse con mayor fuerza en el bolsillo de los ciudadanos, cuando se debe iniciar a hacer frente a los compromisos adquiridos, pero también a obligaciones diversas, como lo son el pago de servicios, tenencias, colegiaturas, entre otros.

Consejos básicos contra la "Cuesta de Enero"

Para proteger la economía familiar y no tener que enfrentar estos problemas, se recomiendan una serie de consejos sencillos de aplicar.

• Un consejo básico es identificar la situación financiera actual, haciendo un análisis de los ingresos y salidas de dinero, en base a ello elaborar un presupuesto sobre los gastos diarios, identificando si existen deudas a saldar, aunados a los pagos que deben ser realizado a partir de enero.
• Una segunda recomendación es la reducción o eliminación de gastos, en donde es necesario hacer un análisis sobre los que pueden ser eliminados y cuales poder ser cambiados por opciones más económicas.
• Una tercera recomendación es evitar contraer nuevas deudas, en donde si ya se ha terminado el presupuesto, es importante no contraer nuevas deudas, lo cual puede afectar la salud financiera futura de las personas.
• En la medida de lo posible ,una acción importante para poder enfrentar este periodo es procurar un incremento de los ingresos, esto es a través de la búsqueda de un segundo empleo, recurrir a la venta de bienes personales, entre otras.
• Iniciar nuevos hábitos de ahorro que permitan reducir los ritmos de gastos mensuales.
• Elaborar una lista de compra por semana o mes, lo que ayudará a contar con un apartado de los productos que realmente son necesarios de adquirir.
• La eliminación de los gastos extras o adicionales, como dejar de consumir en restaurantes, o bares, compra de alimentos chatarra, entre otros.