México califica de "excesiva" la decisión de Perú de romper relaciones

La Cancillería mexicana lamentó la ruptura de relaciones diplomáticas anunciada por Perú y defendió que el asilo a la exprimera ministra Betssy Chávez se otorgó conforme al derecho internacional.

El Gobierno de México rechazó la ruptura de relaciones diplomáticas anunciada por Perú tras el otorgamiento de asilo a la exprimera ministra Betssy Chávez Chino, calificando la medida como "excesiva y desproporcionada".

A través de un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) afirmó que el asilo se concedió en estricto apego al derecho internacional, en particular a la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954, suscrita tanto por México como por Perú.

"México rechaza la decisión unilateral del Perú, al ser excesiva y desproporcionada frente a un acto legítimo de México y apegado a derecho internacional, el cual en modo alguno constituye una intervención en los asuntos internos del Perú", señaló la dependencia encabezada por el canciller Juan Ramón de la Fuente.

La Cancillería subrayó que, conforme al reconocimiento de la Asamblea General de la ONU, el otorgamiento de asilo "no puede ser considerado un acto inamistoso por ningún otro Estado".

Relaciones Exteriores precisó que la decisión sobre Chávez Chino fue tomada bajo el artículo 11 de la Constitución mexicana, tras una evaluación minuciosa y conforme al procedimiento establecido en la Ley sobre Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político.

Asimismo, reiteró que la medida se enmarca en los principios de política exterior, el humanismo mexicano y la vocación histórica del país de ofrecer refugio a perseguidos políticos.

En tanto, el gobierno peruano informó que la encargada de negocios de México en Lima, Karla Tatiana Ornelas Loera, deberá abandonar el país tras la ruptura diplomática.

El presidente interino de Perú, José Jeri, confirmó la medida y expresó en redes sociales: "¡Respeto a nuestra patria!".

Desde diciembre de 2022, Ornelas Loera estaba al frente de la representación mexicana en Perú, luego de que el entonces embajador Pablo Monroy Conesa fuera expulsado y declarado persona non grata por el gobierno peruano.

México reiteró su compromiso con el diálogo y la solución pacífica de las controversias, además de reafirmar los lazos históricos de amistad que lo unen con el pueblo peruano.