Racismo en EU ahora tiene la cara del presidente Trump: Beatriz Álvarez
"Hay quienes creen que Trump sacó el racismo, pero no", expresa la mexicoamericana Beatriz Álvarez en Atlanta, Georgia, uno de los estados clave en esta elección estadounidense.
CIUDAD DE MÉXICO.- "Hay quienes creen que Trump sacó el racismo, pero no", expresa la mexicoamericana Beatriz Álvarez en Atlanta, Georgia, uno de los estados clave en esta elección estadounidense.
"El racismo siempre ha existido en Estados Unidos, nada más que el racismo ahora tiene cara y es la cara del hasta ahora presidente. Por eso se ha exacerbado, ha empeorado, la gente ya no se muerde la lengua y te dicen todo lo que siempre han creído de los latinos", expresa.
"Mucho se dice de Trump. De su gestión no olvidamos la separación de familias, la cacería de indocumentados, las deportaciones y la discriminación a los latinos".
Beatriz Álvarez espera que el próximo presidente cumpla su palabra y que ayude a la comunidad hispana, que, de alguna manera, remedie todo lo que el presidente Donald Trump ha hecho.
"La única verdad es que antes de que Donald Trump entrara a la Casa Blanca, había más tranquilidad para los hispanos en Estados Unidos", dice.
La mexicoamericana afirma que ella fue "el 30 de octubre a emitir mi voto. Las urnas estaban prácticamente todo el día abiertas (...) Había mucha gente. Fui con mi hermana Dany, quien votó por primera vez, y nos tocó hacer fila por casi una hora y media", cuenta la hija de padres mexicanos y nacida en la Unión Americana.
A ambas, les tomó más tiempo entrar que salir: en sólo un par de minutos emitieron su decisión para elegir presidente, a los representantes de su estado en el Congreso, sheriff y algunas leyes. "Al salir, ya había mucha más gente y la fila se había hecho más larga. Sí fue buena la participación", afirma.
La jornada electoral empezó anticipadamente como medida contra el Covid-19. Desde hace dos semanas, los votantes comenzaron a acudir a las urnas.
Aunque el rojo, el color del Partido Republicano, ha predominado en Georgia, un estado tradicionalmente conservador, Bety confía en que en estos comicios el estado refrende su preferencia por el Partido Demócrata.
Durante esta jornada electoral, la venta de alcohol se suspendió y, preparadas para cerrar temprano, las tiendas y centros comerciales protegieron sus puertas y ventanas con maderas para evitar disturbios. Aquí, dice la mexicoamericana Beatriz Álvarez, se esperaba que hubiera caos gane quien gane.