NASA descubre dunas de Marte cubiertas de escarcha con forma peculiar
La NASA identifica dunas atrapadas en escarcha de dióxido de carbono en Marte, clave para estudiar su clima.
La NASA compartió una nueva imagen captada por la sonda Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) en Marte, donde se observan formaciones extrañas con apariencia ovalada, rodeadas por estructuras que semejan “vellos” en sus extremos.
Este hallazgo, realizado en el hemisferio norte del planeta rojo, aporta información valiosa para la investigación sobre su pasado y la posibilidad de vida.
Las imágenes, tomadas por el MRO y recientemente analizadas por científicos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), muestran dunas atrapadas bajo una capa de escarcha de dióxido de carbono formada durante el invierno marciano.
Estas formaciones, apodadas “frijoles gigantes” por los investigadores, varían en tamaño y destacan por los filamentos que emergen de sus bordes, resultado de cambios climáticos extremos.
¿Qué son estas formaciones y qué implican?
Tras un análisis detallado, los expertos de la NASA determinaron que las estructuras son dunas congeladas, cubiertas de una capa de dióxido de carbono que se forma debido a las bajas temperaturas en Marte. Este fenómeno ocurre de manera estacional y es clave para comprender cómo evolucionó el clima en el planeta rojo.
La presencia de escarcha en estas dunas permite a los científicos realizar predicciones más precisas sobre el pasado marciano y evaluar si las condiciones climáticas pudieron sustentar vida en algún momento. Las drásticas variaciones estacionales del planeta ofrecen pistas cruciales sobre la existencia de agua y otros elementos necesarios para la vida.
Importancia del hallazgo
Las imágenes y el análisis de estas formaciones no solo confirman la presencia de agua en forma de hielo en Marte, sino que también abren una ventana hacia la comprensión de su historia climática. Según los científicos de la NASA, estudiar estas dunas atrapadas bajo escarcha ayuda a descifrar cómo se formaron, interactuaron y cambiaron las condiciones del planeta a lo largo de los milenios.
Un paso más en la búsqueda de vida
Este descubrimiento se suma a los esfuerzos de la NASA por confirmar si Marte fue, en algún momento, un planeta capaz de albergar vida. Con la ayuda del MRO y otras misiones espaciales, los investigadores esperan desentrañar los misterios del planeta rojo, explorando sus paisajes y fenómenos naturales para reconstruir su historia.