OceanGate suspende operaciones tras implosión del sumergible Titán
La compañía de exploración submarina toma la decisión luego del trágico incidente que resultó en la pérdida del sumergible en las profundidades del Atlántico Norte.
OceanGate, la empresa propietaria de Titán, el sumergible que sufrió una implosión durante su viaje a las ruinas del Titanic, ha anunciado la suspensión de todas sus operaciones, según informó CNN.
A través de su portal web, OceanGate emitió un comunicado en el que declaraba: "OceanGate ha decidido suspender todas las operaciones de exploración y comerciales".
A pesar de esta declaración, en el sitio web de la compañía aún se pueden encontrar videos de equipos y expediciones, así como descripciones de las aventuras ofrecidas, incluyendo visitas a los restos del Titanic.
La trágica implosión del sumergible Titán ocurrió el 18 de junio mientras descendía hacia las ruinas del Titanic en el Atlántico Norte. OceanGate, con sede en Everett, Washington, era la dueña de este submarino de aguas profundas.
Después de una extensa misión de búsqueda en el área frente a la provincia de Newfoundland en Canadá, finalmente se confirmó la pérdida de la embarcación submarina. Se cree que el casco de Titán colapsó debido a la inmensa presión del agua.
Análisis
El sumergible fue diseñado para resistir dicha presión, por lo que los expertos ahora se esforzarán por determinar qué salió mal exactamente. El análisis de los escombros podrá arrojar luz sobre este aspecto crucial.
Según se estima, Titán se encontraba a una profundidad de 3 mil 500 metros cuando se perdió el contacto. La embarcación estaba sumergida a una profundidad tal que la cantidad de agua sobre ella ejercía una presión equivalente al peso de la Torre Eiffel, es decir, decenas de miles de toneladas.
En caso de que se produjera una ruptura en la estructura, la presión externa habría superado ampliamente a la presión interna del casco, ocasionando la compresión de la embarcación.
La trágica pérdida del sumergible Titán ha llevado a OceanGate a tomar la difícil decisión de suspender sus actividades. La compañía buscará comprender las causas exactas de este incidente y evaluará las medidas necesarias para garantizar la seguridad de futuras expediciones submarinas.
