Japón se preocupa por el Popocatépetl; embajador expresa apoyo a México

La noticia de la actividad volcánica del Popocatépetl ha trascendido fronteras y se ha difundido en noticieros de todo el mundo, incluyendo Japón.

El volcán Popocatépetl, conocido cariñosamente como "Don Goyo", ha captado la atención global con su reciente actividad, ya que las erupciones y emisiones de ceniza y material incandescente han generado preocupación entre las autoridades de Puebla, Tlaxcala y la Ciudad de México, ante la posibilidad de un desastre natural.

La noticia de la actividad volcánica ha trascendido fronteras, e incluso ha dado lugar a memes y burlas en las redes sociales, en particular por la dificultad que presenta para los hablantes no nativos pronunciar su nombre.

Uno de los países que han mostrado interés en este suceso es Japón, pues ante el revuelo el embajador Noriteru Fukushima utilizó su cuenta de Twitter para aclarar la situación y explicar el interés de su país en el Popocatépetl, señalando que en Japón existe preocupación por este volcán mexicano debido a la presencia de volcanes activos en su propio territorio, como el famoso Monte Fuji.

Además, Fukushima aprovechó la oportunidad para aclarar el uso del término "san" en los nombres de los volcanes japoneses, incluido el Popocatépetl. Explicó que en japonés, el carácter KANJI utilizado en los nombres de los volcanes puede tener diferentes lecturas, y "" se puede leer tanto como "YAMA" (montaña) como "SAN". Aclaró que esta lectura no tiene relación con el honorífico "san" utilizado en Japón para dirigirse a una persona con respeto, como "señor" o "señora" en México.

Las palabras del embajador japonés fueron bien recibidas por los usuarios de las redes sociales, quienes agradecieron su explicación y resaltaron la unión entre ambas naciones. Varios internautas destacaron la dificultad de pronunciación que el nombre del volcán presenta para los hablantes japoneses debido a la combinación de sonidos "TL".

Además, expresaron su deseo de colaborar y compartir conocimientos en materia de prevención y protección ante desastres naturales, ya que tanto Japón como México comparten la experiencia de vivir en zonas sísmicas y volcánicas.