Psicólogo afirma: ley antitabaco no disminuirá su consumo

El psicólogo clínico, Adrián Chávez Cuevas, explicó que el nuevo reglamento para la venta y consumo de tabaco no tendrá impacto, pues es la parte cultural y de educación en menores donde se debe promover el no consumo.

No exhibir el tabaco en los establecimientos y tiendas de autoservicio no inhibe el consumo y el impacto podría ser mínimo, consideró el psicólogo clínico, Adrián Chávez Cuevas.

El 15 de enero entró en vigor el nuevo reglamento para la venta y consumo de tabaco, que señala que las tiendas ya no podrán tener en exhibición estos productos.

“Los que ya fuman no van a tener el menor problema en pedir los cigarros en cualquier tienda de conveniencia o supermercados, ya que solo deberán pedirlos por la marca de su preferencia”, mencionó.

El hecho de que no estén a la vista no cambia realmente nada, hay otros temas importantes alrededor del cigarro en los cuales ya se ha avanzado mucho como por ejemplo que hay lugares asignados para fumadores en restaurante y áreas públicas, detalló Chávez Cuevas.

“Entonces el impacto va a ser mínimo, no es realmente algo que impacte de manera importante, primero porque por ley, por ejemplo, no pueden venderle a los menores de edad, eso ya es un gran avance”, comentó.

Se requiere trabajar más en la parte cultural y la educación sobre el consumo del tabaco, es decir, promover que no se consuma el cigarro entre los adolescentes.

“Muchas veces hemos visto como muchos jóvenes les dan el cigarro a otros jóvenes, incluso menores de edad, y hasta en las propias casa los permiten que sus hijos fumen”, expresó.

Hay que romper con esa herencia cultural de consumo y de cómo se transmite entre las generaciones, es ahí donde puede impactar verdaderamente una política pública, enfatizó.

Entre los adolescentes cada vez es más temprana la edad de inicio al tabaquismo, se sabe que la edad predominante es entre los 12 y 13 años, pero ahora hay niños que fuman desde los 9 y 10 años, según la Encuesta Nacional de Consumo, mencionó.

“Los adolescentes se sienten presionados por otros compañeros más grandecitos que iniciaron ya a fumar, es algo muy parecido a lo que sucede con el alcohol, el hecho de sentirse grandes”, agregó el psicólogo clínico y maestro universitario.