Chihuahua pidió salida de Sedena tras asesinato de jesuitas
López Obrador calificó la propuesta como "indecorosa", pues la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional acudieron a la Sierra Tarahumara para localizar a las víctima.
El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó al Gobierno de Chihuahua de pedir la salida del Ejército para localizar los cuerpos de dos curas jesuitas, el de un beisbolista y un guía de turistas, quienes fueron asesinados por José Noriel Portillo Gil, "El Chueco", en Cerocahui, Municipio de Urique.
López Obrador calificó la propuesta como "indecorosa", pues la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena)y la Guardia Nacional acudieron a la Sierra Tarahumara para localizar a las víctimas que fueron ejecutadas y raptadas en junio del año pasado, pero también debían encontrar al "Chueco".
"Era una gente ahí conocida ('El Chueco'), ¿ que hicimos? Pues, desde el primer momento actuamos, fue la Guardia nacional, fueron elementos de la Defensa, se inició la búsqueda, nos mandaron a decir de que si salía el Ejército, iban a entregar los cuerpos y dijimos 'no'.
"Y de repente, ya se había buscado y no estaban los cuerpos, y de repente aparecieron los cuerpos, por donde ya se había buscado, o sea que cambiaron de parecer, porque la propuesta es 'ya, entregamos los cuerpos y váyanse' y dijimos no", aseguró en conferencia matutina desde Palacio Nacional.
-¿Quién lo propuso?, se le preguntó
"Del Gobierno de Chihuahua", contestó.
-¿La Gobernadora?, se le insistió.
"Del Gobierno de Chihuahua", reiteró.
"Entonces, ¿qué sucedió? Aparecieron los cuerpos y no salió el Ejército, se mantuvo, y lo mismo la Guardia Nacional".
A nueve meses del multihomicidio de los jesuitas y los dos civiles, "El Chueco" fue localizado ejecutado en Choix, Sinaloa, la misma región del triángulo dorado del narcotráfico donde operaba para el tráfico de drogas.