Staus teme sanción sesgada a estudiante que portó arma de postas en el campus Hermosillo

El secretario del Staus, Juan Díaz Hilton, expresó que la decisión que tome el Consejo Divisional de Humanidades de Bellas Artes no debe estar sesgada por el ruido externo a la Universidad de Sonora

HERMOSILLO, SON.- La dictaminación del Consejo Divisional de Humanidades de Bellas artes sobre el caso del estudiante que se grabó dentro de las instalaciones de la Universidad de Sonora con un arma de postas podría ser sesgada y carente de objetividad, señaló el maestro Juan Díaz Hilton, secretario general del Staus.

A días de que la administración universitaria decida si sancionará al responsable con una amonestación o una suspensión temporal o definitiva, las opiniones al respecto se dividen dentro y fuera del campus de la máxima casa de estudios.

“El Consejo es un espacio muy cerrado, son muy pocos integrantes que efectivamente pudieran, como decimos coloquialmente, 'tirar línea'. Puede haber ahí una opinión prevaleciente de parte de la administración que obstaculice el análisis objetivo de este particular asunto. En ese órgano está únicamente la decisión unilateral y en este tema, que es más público, esperemos que se lleve a cabo con esa objetividad que se merece”, apuntó Díaz Hilton.

El secretario del Staus coincidió con cierto sector de los estudiantes universitarios que expresaron que el comunicado emitido por la administración universitaria a raíz del incidente que causó revuelo en redes sociales demeritaba de manera innecesaria al estudiante identificado en el video.

“Da la impresión de que hay una predisposición ahí manifiesta, que como jueces que son no esperaríamos que la hubiera. Esa parte del comunicado no tendría razón de ser por parte de las autoridades”, añadió el maestro.

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Reiteró que hacen falta reformas a la Ley número 4 Orgánica de la Universidad de Sonora, que en su artículo 65 expone que son faltas graves de responsabilidad para los alumnos la realización de actos contrarios a la legalidad y al respeto que deben tenerse entre sí los miembros de la comunidad universitaria, con base a lo cual podría expulsarse de por vida al joven señalado.

“En los sesentas, setentas, todavía en los ochentas había agitaciones estudiantiles, era cortar y mandar esas acciones a la ilegalidad. Ahí retomo el tema de la libertad de expresión. A diferencia de otras universidades, la Ley 4 coarta esas acciones a los estudiantes. No es únicamente el discurso, también en las acciones como cerrar la escuela. En otras universidades esto es legal, y en la Ley 4 se considera como algo ilegal. Ahí está el Artículo 65 y habría de modificarse para otorgarle esta posibilidad de manifestarse al alumno”, indicó el secretario.

La reforma a la Ley 4 es una de las acciones que se han impulsado con mayor énfasis desde del Staus, y se espera que el tema se retome en el próximo ciclo escolar.

“Nosotros proponemos que la Universidad debe de ser un espacio crítico, donde se revisen las ideas y las acciones. Desde el cubículo, desde el pupitre tiene sus alcances, pero también sus limitantes. Hay que abrir espacios y otras formas de expresión”, concluyó Díaz Hilton.