Reinicia la venta de cuadernos, mochilas y uniformes en el centro

Una cadena de importaciones que también vende cuadernos y mochilas recibió la semana pasada mercancía de útiles escolares para sus bodegas, aunque los pedidos fueron generados por sistema.  

HERMOSILLO, SON.- El regreso a clases presenciales sigue generando incertidumbre en la población hermosillense, ante el repunte de casos de Covid-19 en la entidad, por lo que los comerciantes de útiles escolares ubicados en el centro de la ciudad no han abastecido por completo sus bodegas.

Los propietarios de estos establecimientos aseguran que a pesar de que se confirmó el regreso presencial, sus productos escolares se han vendido muy poco, pues la gente aún no confía en que sí se vaya a efectuar este cambio.

“Nada más nos han pedido dos cotizaciones de paquetes escolares en lo que va de agosto. Si fuera una temporada normal ahorita ya hubiera mucha gente para estas fechas, como siempre dejamos todo a lo último”, afirmó una comerciante de una papelería ubicada en la avenida Dr. Alberto G. Noriega.

Por su parte, el propietario de un café Internet ubicado en la misma zona mencionó que es normal que los comerciantes no estén adquiriendo útiles escolares para sus bodegas, debido a que el año pasado los negocios de muchos quebraron a raíz de ello.

“Si se ponen a invertir pensando que sí va a haber un regreso a clases, pueden quebrar, como ya les paso a muchos el año pasado. Hasta que ya estén en la escuela es cuando nos vamos a empezar a alivianar. Aquí en el centro se mueve mucho dinero cuando los chamacos están yendo a clases. Y así está el asunto, pero aquí andamos en la pelea”.

Mientras tanto, algunas tiendas de uniformes escolares por la calle Guerrero cuentan con el stock lleno, aunque sus empleados afirmaron que en promedio han vendido de cinco a siete piezas diarias durante el fin de semana, lo cual es una estadística baja comparada con años anteriores.

Una cadena de importaciones que también vende cuadernos y mochilas recibió la semana pasada mercancía de útiles escolares para sus bodegas, aunque los pedidos fueron generados por sistema.

“Aumentamos el área de los útiles un poquito, porque nos llegó más mercancía, pero sí está muy lenta la venta. De hecho, han llegado muchos niños que ven que estamos acomodando los cuadernos y todo eso, y les dicen a sus mamás que le compren esto o aquello, y ellas les dicen que hasta que digan si sí o si no van a regresar, porque para qué lo van a comprar si no, porque no se sabe con la gente, como el semáforo ya está en rojo de vuelta”, señaló el gerente de la tienda.

Carlos Castro