El 'Sueño Americano' de estos migrantes africanos se trunca en Hermosillo

Un centenar de migrantes de origen africanos sufren las inclemencias del clima, el hambre y la sed por fuera de la Central de Autobuses de Hermosillo, donde no han podido tomar un trayecto que los acerque a la frontera con Estados Unidos.

Cansados, sin dinero, con incertidumbre pero también con una bolsa llena de ilusiones, es como transitan los migrantes en su objetivo de alcanzar el sueño americano, quienes en su paso por Sonora se quedan a un gran trecho de lograrlo. 

Desde hace tres días, más de cien migrantes provenientes de diversas partes del continente africano se encuentran en la Central de Autobuses de Hermosillo, debido a que han enfrentado inconvenientes como sobrevivir en un país que no conocen, enfrentarse a la inseguridad y sobre todo: la barrera del lenguaje. 

Muray Abilli, un joven de 22 años, quien habla árabe, francés y también un poco de español básico, relató que han hecho un gran recorrido al viajar en avión a Turquía, para luego dirigirse a Ciudad de México y peregrinar a Guadalajara hasta llegar a la capital sonorense. 

El joven de origen africano sabía que el camino sería complicado, sin embargo, estaba determinado a cumplir con su objetivo de hacer la ruta hacia Estados Unidos por Sonoyta, Sonora y con ello lograr mejores oportunidades y una vida mejor.

“Hay personas que llegaron hace dos o tres días. Algunos tienen escasez de dinero, otros tienen problemas con las compañías de autobuses que no les quieren vender boletos”, comunicó el joven a través de una aplicación para traducir sus palabras.

El Sueño Americano de estos migrantes africanos se trunca en Hermosillo

Dificultades

Muray Abilli dijo que lo más difícil para ellos es recibir extorsiones por parte de la policía migratoria, quienes los despojaron del dinero con el que contaban para llegar hacia la frontera y cruzar al país vecino. 

“Puedes ayudarnos a resolver el problema de las multas y protegernos de la policía que nos quita el dinero en el camino. Vinimos aquí con las manos vacías. Todo nuestro dinero fue robado por la policía”, dijo.

Otro de los problemas que los migrantes han enfrentado, ha sido la pérdida de uno de sus compañeros, P Ba Salif, de 35 años, quien era originario de Bagodine, Mauritania y falleció en Ciudad de México por falta de alimento y agua. 

Muray dijo que, debido a las condiciones en que se encontraba el grupo, tuvieron que dejarlo en el recorrido, pues no podían hacer más por él a pesar de haberlo querido.

El problema es en México

Muray indicó que el centenar de migrantes tiene un lugar a donde llegar en Estados Unidos, lo que representa un gran apoyo para salir adelante, sin embargo, el problema lo enfrentan en México. 

“USA tengo trabajo, tengo habitación, no problem, problem aquí en México, persona normal no problem, problem policía, dinero dinero, dinero”

Al momento, no hay una fecha estimada para que los migrantes retomen su viaje, puesto que están varados en la ciudad. El joven y sus compañeros de viaje hicieron un llamado a la comunidad local para solicitar la donación de alimento y agua, y pidieron la ayuda de las autoridades para llegar a su destino.