La Casa de los Duendes cuenta las leyendas de Hermosillo a través de sus nuevos huéspedes

Irlanda Medina busca mantener con vida el legado de su padre con "La Casa de los Duendes", misma que tras el fallecimiento del profesor Gabino Medina Vázquez, ha abierto de nuevo sus puertas para ser visitado.

HERMOSILLO, Son.- Nuevos inquilinos llegaron a la Casa de los Duendes, representando a personajes de mitos y leyendas de la ciudad y del resto del país, en una búsqueda por rescatar la cultura de la tradición oral de la capital sonorense.

La iniciativa corrió a cargo de Irlanda Medina, hija del profesor Gabino Medina Vázquez, personaje muy querido en la comunidad que adquirió la propiedad ubicada en la avenida No Reelección no. 8, en el Centro Histórico de la ciudad, para resguardar al centenar de duendes que lo acompañaban en su colección.

Así, los visitantes podrán identificar algunos de los personajes más emblemáticos de las leyendas sonorenses, como El Casino del Diablo o el Eterno Enamorado, así como de otros mitos menos reconocidos, como el Fantasma de Siete Cerros y el Ladrón de la Cueva de Santa María.

“Cuando vas a Kino, antes de llegar a la calle 12 hay una curva y está una hilera de cerros. Y se contaba que te pedía raite una mujer, y la subías y se venía platicando contigo y antes de llegar al aeropuerto se te desaparecía. Y la otra es que si no le dabas raite, cuando volteabas por el retrovisor estaba en el asiento de atrás. Entonces a fuerzas se subía esta mujer, era vaquetona”, contó entre risas Irlanda.

La leyenda del Ladrón de la Cueva de Santa María, por su parte, cuenta la historia de la ciudad en los inicios de su fundación, cuando un hombre robaba a los visitantes que llegaban de paso, y cuyo botín guardaba en la Cueva de Santa María.

“Por eso la gente se pierde, porque a la gente que entra a buscar el tesoro él ya no les permite salir”.

(Foto: Carlos Castro/EXPRESO)

NUEVOS DUENDES COMPLETAN LEYENDAS DE MÉXICO

La nueva galería de personajes la completan otras leyendas de origen nacional, pero reinterpretadas localmente, como La Llorona, “porque territorio nacional, donde llueve y hay agua, hasta en los charcos sale La Llorona”, y La Planchada.

“Una enfermera del Hospital General que se iba a casa con un doctor. El doctor se va por los cigarros, no vuelve, y no se hace la boda. Y ella en su amargura empieza a dejar morir a los pacientes que le tocan. Cuando ella fallece, en su arrepentimiento se empieza a aparecer en el hospital y empieza a velar por los enfermos que no tienen quien los cuide”.

La Casa de los Duendes reabrió sus puertas el pasado mes de octubre, luego de permanecer cerrada por más de un año tras el fallecimiento de don Gabino en julio de 2020.

Ahora, Irlanda busca rescatar y promover el legado de su padre para el deleite de miles de visitantes locales y de otros lugares del país que disfrutan de igual manera las decenas de figuras de hadas, muñecas, aluches y máscaras que han hecho de este lugar una visita obligada desde su reapertura.

“Que no nada más sea de los duendes, sino que también tenga ese lado cultural. Es poco a poco ir agregando personajes de la cultura mexicana en tamaño duende, para que tenga ese otro aspecto”, señaló Irlanda, adelantando que otros personajes nacionales ya reservaron su lugar en esta casa, como Cantinflas y María Félix, instalándose en los próximos días.

La casa abre sus puertas de viernes a domingo en un horario de 17:30 a 22:30 horas, recibiendo a gente de todas las edades en lo que es, sin duda, uno de los rincones más singulares de la ciudad.

“La energía de los duendes no te dan ganas de irte. Estás bien a gusto y de toda la gente que viene nadie lo hace con mal rollo, uno pensaría que algunos vendrían a burlarse o algo, pero no, toda la gente es bien serena. La casa tiene una energía muy positiva”, concluyó Irlanda.

(Foto: Carlos Castro/EXPRESO)