Centro Galilea: una luz de esperanza

Desde el 2020, un grupo de personas se enfocaron en ayudar a los más necesitados.

El Centro Galilea es un albergue integral y temporal para personas en situación de calle, el cual inició  con sus labores en plena pandemia, el 12 de diciembre de 2020 y hoy en día es el hogar de 21 personas, 17 hombres y cuatro mujeres. 

Claudia Eugenia Villa Hernández, directora y fundadora del Centro Galilea en Hermosillo, explicó que la meta es que este albergue tenga sucursales en todo México, ya que no sólo brinda alimento, sino atención integral para que estas personas puedan reincorporarse en el sector productivo y tengan una segunda oportunidad de vida. 

La mayoría de las personas que están o han pasado por el Centro Galilea son del sur de México, de estados como Chiapas, Oaxaca y Veracruz, aunque también hay de distintos puntos de Sonora y Sinaloa, donde el común denominador es que llegaron aquí buscando el ‘sueño americano’ queriendo cruzar a Estados Unidos.

Otros llegan, según la directora, contratados para trabajar en la Calle 12 en la pizca de uva, chile u otras y al acabarse el empleo se quedan sin dinero para poder regresar y terminan en las calles hasta que su vida los lleva a caer en la indigencia. 

“Aquí les damos toda la atención desde el momento en que ellos entran, una persona que llega aquí ha perdido todo, su familia, su trabajo, su casa incluso su autoestima y su seguridad, llegan con deshidratación, desnutrición, diferentes tipos de enfermedades, la enfermera le revisa desde los signos vitales hasta otras enfermedades.

“En esta área de aislamiento permanecen cinco días, así se ven los falsos positivos, si tienen Covid, si tienen tuberculosis o algún padecimiento, también los comportamientos agresivos, problemas de adicciones, la famosa ‘malilla’, en ese aislamiento se le da seguimiento de parte del área de salud y del psicólogo Édgar Contreras”, explicó.

Piden apoyo

Villa Hernández detalló que después de cinco días en el área de aislamiento pasan al pabellón de hombres o mujeres, ahí se da seguimiento a su comportamiento, socialización así como de nutrición, ya cuando están estables tanto psicológica como personalmente se les ayuda a encontrar un trabajo. 

“Queremos que la sociedad nos apoye con bolsas de trabajo en sus empresas, ahorita están empresas de seguridad que nos están apoyando con la contratación de nuestros residentes, se están sumando varias empresas e instituciones para contratar a las personas que están preparadas para ingresar.

“Finalmente se les da trabajo, empiezan a laborar y rentan su cuarto, su casa, de vivir en las bancas del (parque) Mundito, de dormir en las banquetas en el Hospital General ya tenemos gente que trabaja en distintos establecimientos, están siendo productivos, es una segunda oportunidad de vida”, agregó. 

La directora del Centro Galilea resaltó que todos reciben terapia psicológica y se les ayuda a trazar de plan de vida, en este deciden si quieren trabajar o regresar a su lugar de origen y entonces se empieza a buscar a sus familiares mediante redes sociales para reencontrarlos, entre las historias hay quienes ya los daban por muertos al no saber de ellos durante varios años.

Son seis meses el tiempo que dura la terapia dentro del Centro Galilea algunos tardan un poco más, otros menos para lograr su reinserción ya sea laboral o familiar; en la actualidad también se busca poner en marcha varios proyectos para capacitarlos en el ámbito laboral.

Proyectos pendientes

“Queremos formar un gallinero, un huerto, tenemos un cuarto de máquinas de coser, necesitamos una persona que quiera venir a dar un curso de costura para hacer una pequeña producción, alimento para gallinas, las mismas gallinas, algo para nuestro huerto y los alimentos no perecederos”, expresó Villa Hernández.

Un 30% de las personas que ingresan al Centro Galilea no logra culminar con éxito la reinserción debido a una adicción, es el cristal la droga más común, ellos pueden abandonar el lugar cuando deseen ya que su estadía es totalmente voluntaria, incluso las puertas del lugar están abiertas 24/7.

“Ojalá muchas empresas nos apoyen con su bolsa de trabajo, pueden venir conocer a las personas para darles trabajo, permanentemente también necesitamos todo lo necesario para una casa, jabón, todo para higiene personal e higiene del centro.

“DIF municipal nos está apoyando y la caridad de la sociedad civil, yo le agradezco enormemente a las personas que nos han apoyado, la empatía de la sociedad con la causa, vienen personas a apoyarnos, también están abiertas las puertas para quienes deseen hacer su servicio social o prácticas profesionales pueden acercarse con nosotros”, afirmó.

Las personas interesadas en donar su tiempo como voluntarios o que deseen hacer alguna aportación en especie pueden acudir al albergue ubicado en la calle Tepic número 8 de la colonia Palo Verde.