En el ajonjolí de todos los moles se ha convertido el consejero jurídico de la Presidencia…
EN EL AJONJOLÍ de todos los moles se ha convertido el consejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer Ibarra, a raíz de que el gobierno superó todos los amparos que impedían el inicio de las obras en el aeropuerto en Santa Lucía.
Y DADO que ahora es el hombre de todas las confianzas de Andrés Manuel López Obrador, varios integrantes del gabinete se han acercado a él para pedirle asesoría sobre cómo librar los obstáculos legales que tienen frenados otros proyectos de la 4T.
HA ESTADO invitado en prácticamente todas las reuniones del gabinete y los secretarios tienen claro el peso que tienen sus opiniones en las decisiones del Presidente.
ASÍ ES que si lo ven entrar con su compacto equipo de colaboradores desde las 5:00 horas a Palacio Nacional y llega la madrugada del día siguiente y no ha salido, es porque anda muy ocupado resolviendo varias tareas de esas que son prioridad para su jefe.
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UN EXTRAÑO episodio se vivió en la famosa librería Ateneo Grand Splendid de Buenos Aires cuando un cliente fue acusado de querer robarse un libro y los empleados llamaron a la policía.
EL TEMA hubiera sido anecdótico si no fuera porque el hombre señalado por querer llevarse un libro sin pagarlo fue el embajador de México en Argentina, Óscar Ricardo Valero.
QUIENES atestiguaron el bochornoso incidente cuentan que un par de horas después el representante mexicano se fue sin consecuencias.
Nomás quedó la duda de si se trató de un malentendido o lo dejaron ir por su inmunidad diplomática... ¿qué habrá sido?
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ENTRE la espada y la pared quedó uno de los principales aliados de la 4T en materia de la defensa de los derechos de los migrantes, el padre Alejandro Solalinde.
UNA CERCANA colaboradora, la hermana Leticia Gutiérrez, criticó en un post de Facebook -dirigido a Solalinde- la política migratoria de Andrés Manuel López Obrador, a la que calificó de agresiva, violenta, abusiva y militar.
Vaya posición incómoda.
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TRAS varias denuncias de que el Campo Marte se ha convertido en un salón de fiestas nocturnas con mucho alcohol y más escándalo, vecinos de Polanco y directivos del Club de Industriales se reunieron con el titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval, para exponerle el caso.
ACORDARON establecer una mesa de trabajo que garantice el buen uso del recinto, la cual será coordinada por una representante vecinal.
Y es que no es lo mismo escuchar en plena madrugada el grito de ¡firmes!... que el de ¡saluuud!