Como el convoy del Metro de la CDMX

COMO el convoy del Metro de la CDMX que quedó colapsado y partido por la mitad tras el derrumbe en la Línea 12, así quedaron las dos fuerzas predominantes al interior de Morena tras la tragedia del lunes que costó 24 vidas.

LO OCURRIDO le pega a los dos contendientes más fuertes a la candidatura presidencial de 2024: a Claudia Sheinbaum, por ser la responsable actual del Metro desde la Jefatura de Gobierno, y a Marcelo Ebrard por haber sido el gobernante que impulsó y construyó la cuestionada “línea dorada”.

PERO el convoy de las responsabilidades no para sólo en esas dos estaciones, también pasa por Mario Delgado, quien, como secretario de Finanzas local llevó la licitación y el fondeo de esa obra. Mal momento para que el dirigente morenista sea cuestionado a un mes de las elecciones.

HABRÁ que esperar los peritajes que harán la Fiscalía capitalina y el consorcio noruego DNV para saber sobre quién recaen las responsabilidades y a quién de esos tres protagonistas les salen más caras sus acciones y omisiones.

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POR MÁS que en Morena digan que frenaron durante dos días las campañas electorales en el Valle de México por respeto a los fallecidos en la tragedia del Metro y a sus familias, cuentan que la verdadera razón de la pausa es otra.

SEGÚN se supo, ayer temprano salieron brigadistas a entregar volantes y pegar propaganda, pero fueron muy mal recibidos en varias alcaldías en donde los vecinos les gritaban que se fueran y les reclamaban no tener vergüenza para pedir el voto por los morenistas después de lo ocurrido en Tláhuac.

DE AHÍ que el Comité Ejecutivo Nacional dio la orden de suspender la campaña en calles y hasta en redes sociales y esperar dos días a que se calmaran las aguas. Ya se verá si les sale la jugada o si en los próximos días siguen o incluso arrecian los reclamos ciudadanos.

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AUN CUANDO la FGR de Alejandro Gertz detuvo y trasladó a la SEIDO a Héctor “El Güero” Palma para ver si tiene pendientes con la justicia, se ve prácticamente imposible que vuelva a la cárcel con todo y el berrinche que hizo Andrés Manuel López Obrador por lo que calificó como un “sabadazo” del juez que decidió liberarlo.

Y ES QUE, quien fuera uno de los capos más fuertes de México enfrentaría cualquier eventual proceso en prisión preventiva domiciliaria, beneficio que se le otorgaría por tener 80 años de edad.

ASÍ ES QUE están corriendo las 96 horas que tiene la Fiscalía para definir la situación legal de Palma, plazo que -vaya casualidades de la vida- termina ¡la madrugada del sábado!