Ayer no fue martes 13, pero sí fue un mal día para la República…

AYER no fue martes 13, pero sí fue un mal día para la República, para la democracia y para la certeza jurídica que tanto trabajo cuesta construir.

Y es que, por un lado, en la Cámara de Diputados se dio carta blanca al gobierno para ejercer el terrorismo fiscal, y por el otro, en el Senado se aprobó la revocación de mandato, que es como llaman los morenistas al juego eterno de autopromoción del Presidente.

EN San Lázaro la bancada que encabeza Mario Delgado se negó a discutir cualquiera de las 34 reservas a la reforma.

Con el apoyo de PT, Movimiento Ciudadano, PES y el PVEM, echaron a andar la aplanadora... ¡y adiós, Nicanor!

El resultado: se acaba la presunción de inocencia, pues empresas y contribuyentes serán considerados culpables aunque demuestren lo contrario.

AUNQUE el PAN, el PRI, el PRD, cinco morenistas y dos diputados sin partido dieron la pelea, se aprobó la reforma que mete en el costal de la delincuencia organizada a la iniciativa privada.

El único priista que apoyó la medida -¡qué raro!- fue Rubén Moreira.

POR LO QUE se refiere a la revocación del mandato, si bien hubo modificaciones a la iniciativa original, la realidad es que Andrés Manuel López Obrador tiene ya el marco legal perfecto para seguir en campaña por lo que resta de su gobierno.

Y dado que el pueblo sabio es el que quita y el que pone, en una de ésas a lo mejor hasta se anima a que haya reelección.

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LA PREOCUPACIÓN de la IP era de tal tamaño que el líder de los industriales de Nuevo León, Adrián Sada, voló con urgencia a la CDMX para reunirse en Palacio Nacional con Alfonso Romo y con el consejero jurídico Julio Scherer Ibarra, pero no logró conmoverlos.

SI YA de por sí la inversión privada ha tenido retrocesos en los últimos tres trimestres, con estos “incentivos” fiscales, la cosa pinta peor.

Cosa de ver que los expertos dicen que si este año el crecimiento económico rondará el 0.3%, con los cambios fiscales, para el 2020 ni eso se logrará.

¡Gulp!

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EN EL combate a la delincuencia no todas las autoridades tienen las mismas prioridades.

Cosa de ver que los alcaldes morenistas de Toluca, Ecatepec y Chalco dejaron plantado al secretario de Justicia y Derechos Humanos del Edomex y a cuatro ediles más. 

Y eso que la reunión era para atender la nueva alerta de género en la entidad, uno de los asuntos que más les interesa... pero en el discurso.

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