Morena en Jalisco: sale Lomelí ¿entra Lemus?
Después de la caída estrepitosa del superdelegado en Jalisco, Carlos Lomelí —ahora además de despedido también vetado con sus empresas farmacéuticas en el gobierno federal— Morena y la 4T han comenzado a buscar nuevos prospectos para la estratégica entidad jalisciense, con miras primero a los comicios de 2021 y luego a la renovación de la gubernatura en 2024.
Y en lo que parece ser la respuesta al intento del gobernador Enrique Alfaro por construir un "bloque de oposición" que enfrente a la hegemonía morenista en los comicios intermedios por la Cámara, ahora desde el partido gobernante buscan fracturar a Movimiento Ciudadano en el estado donde es más fuerte. Desde Morena han puesto en marcha una sigilosa operación para arrebatarle Jalisco al rijoso gobernador emecista y estarían hablando con el alcalde de Zapopan, Pablo Lemus, aliado desde hace casi cinco años de Enrique Alfaro, para convencerlo de empezar una mudanza silenciosa, pero efectiva a las filas de la Cuarta Trasnformación.
El expresidente de Coparmex Jalisco ha tenido reuniones por separado con el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo (su padrino político), con la dirigente nacional de Morena, Yeidckol Polenvsky, y con Gabriel García, el Coordinador General de Programas Integrales de Desarrollo y jefe de los delegados en los estados.
Pablo Lemus le había pedido a Enrique Alfaro sucederle en la gubernatura, pero lo habría rechazado pues su alfil es el joven senador Clemente Castañeda, el gerente que puso al frente de la dirigencia del MC. Un indicio de que el alcalde prepara un salto a Morena es la posición que tomó en el asunto de las Villas Panamericanas. Alfaro ordenó venderlas en un acuerdo con Lemus, pero éste último lo traicionó y usó el tema de pretexto para romper públicamente con el gobernador al prohibir los permisos para su habitabilidad.
La trama es simple, Lemus se iría a Morena como candidato a la capital del estado en 2021 y como candidato a gobernador en 2024. Con este movimiento Lemus le daría además la puntilla a Lomelí y pondría a prueba su popularidad contra un debilitado Enrique Alfaro.
Y es que en la lectura de la 4T, Movimiento Ciudadano está muy frágil en Jalisco. Tras las elecciones federales de 2018 apenas pudo conservar su registro al haber obtenido en el cómputo final porcentajes mínimos con un 4.41% de votos en la elección para diputados federales y 4.68% para senadores.
Además, el tema de la seguridad le está haciendo crisis al gobernador emecista Enrique Alfaro.
Otro elemento es la pérdida de popularidad del gobernador, quien mantiene una tendencia decreciente en sus niveles de aprobación en el estado.
En Jalisco se libra entonces una lucha estratégica con miras a 2021: de un lado Enrique Alfro intentando liderar una gran alianza de partidos de oposición que formen un "bloque opositor" para enfrentar a Morena y a López Obrador en 2021, y del otro lado, Morena buscando sustituir el extraviado liderazgo de Lomelí, con un nuevo prospecto para el 2024 en la persona del actual alcalde de Zapopan, Pablo Lemus, con lo que de paso le asestarían un golpe a Alfaro y a MC en el estado. Veremos a quién le sale mejor la operación.