El destape de Kukulcán-Mauricio Vila
"El destape de Kukulcán-Mauricio Vila", escribe Ulrich Richter en #ColaboraciónEspecial
El presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró la 86 Convención Bancaria en la bella ciudad de Mérida. Ante un nutrido público de banqueros y financieros al iniciar su intervención destapó al gobernador panista de Yucatán, Mauricio Vila, como aspirante a la Presidencia en 2024.
Dicho Gobernador es uno de los mejores posicionados en el electorado debido a sus buenos resultados. En efecto, ha llevado a Yucatán a ser una de las mejores atracciones turísticas en donde ha sobresalido la gestión de su secretaria de Fomento Turístico, Michelle Fridman Hirsch. No sólo en ese tópico, sino en el tema de seguridad ha dado los mejores resultados, pues su secretario de Seguridad Pública, Luis Felipe Saidén Ojeda, quien lleva trabajando varios periodos con los antecesores de Vila, ha sido un excelente secretario, que incluso, junto con Omar García Harfuch, podríamos decir que son los mejores secretarios de seguridad en el país.
Así que el destape del Gobernador proclamado en tierras mayas lo convierte en el candidato que podríamos llamar Kukulcán, quien podría competir con otros aspirantes ungidos en el Templo Mayor, como Claudia Sheinbaum, Comalcalco de Adán Augusto, Tlatelolco de Marcelo Ebrard o Ricardo Monreal en la Casona de Xicoténcatl.
En el majestuoso centro arqueológico de Chichén Itzá se encuentra la maravillosa pirámide de Kukulcán, de 26 metros de altura, una base cuadrada de 55.5 metros de lado y el cuerpo formado por nueve plataformas que se van degradando hacia lo alto; se localiza en el municipio de Tinum, en Yucatán.
Cada uno de los cuatro lados, que representan los cuatro puntos cardinales, está “cortado” en dos por una escalinata de noventa y un peldaños. Con la llegada de los equinoccios, a través de los peldaños degradados de la pirámide, se proyectan en la barandilla de la escalinata norte siete triángulos de luz que, al unirse con la cabeza de serpiente situada en la base de las gradas, dan la sensación de que una serpiente de luz cae del cielo y se desliza por las escaleras, mientras que su sombra atraviesa la plaza (un fenómeno que sólo puede contemplarse desde el templo situado en lo alto de la pirámide, prerrogativa exclusiva de los Quetzalcaan). El equinoccio es ese momento exacto en el que el sol cruza el ecuador, determinando la misma duración del día y la noche en cualquier parte del mundo.
La serpiente de luz representa el día, la serpiente ascendente capaz de crear hombres y santos. Por el contrario, la serpiente de sombra representa la noche, las tinieblas más profundas, culpables de la perdición del hombre.
El Popol Vuh afirma que los antiguos consideraban las pirámides como una escalera a las estrellas y en el calendario maya a los equinoccios se les llamaba “eb”, que también significa “estrella” o “escalera”.
La pirámide de Kukulcán, además de representar el número de días del año e indicar el movimiento del planeta alrededor del sol, señala también el equinoccio de primavera (el 21 de marzo) y el del otoño (el 23 de septiembre). Por ello, a pocos días antes de celebrarse el equinoccio de primavera, cuyo emblema simbólico lo podemos observar en la pirámide, se realiza el profético destape de Kukulcán.
Feliz equinoccio de primavera.
ULRICH RICHTER
Twitter: @UlrichRichterM
Abogado y activista, maestro en Ciencias Penales