¿Una nueva era de Guerra Total? Reflexiones desde Europa Central

"¿Una nueva era de Guerra Total? Reflexiones desde Europa Central", escribe Mauricio Meschoulam en #ColaboraciónEspecial

Probablemente la historia está cambiando ante nuestros ojos. Esto rebasa con mucho al tema de Ucrania. Tuvimos oportunidad de estar a distancia en el foro de seguridad internacional de Bratislava, organizado por el centro de pensamiento GLOBSEC. Este foro, muy vinculado a la OTAN, reúne a gran cantidad de personas de distintos países que ocupan u ocuparon cargos cruciales como presidencias, primeras magistraturas, ministerios de defensa, puestos militares, en conversación con gente del mundo de la academia, el periodismo y think tanks. Resumo unos apuntes al respecto:

1. Ucrania en el foco. De manera natural, especialmente por la cercanía geográfica, la invasión rusa a ese país se siente como una afrenta de casa y ocupó la mayor parte de las discusiones. Hubo una importante participación de funcionarios ucranianos en activo (algunos a distancia). Se nos dijo que la esperada contraofensiva es inminente.

2. La autoculpa. El ministro exterior de Austria lo puso así: "nos dormimos". En general, el mensaje fue: Durante 30 años pensamos que haber sido "amables" con Rusia (y también con China) iba a producir condiciones de paz, cooperación y prosperidad para todos. Pero las señales estaban todas ahí y "no las quisimos ver". El General Allen, estadounidense, excomandante de las fuerzas de su país en Afganistán, indicó que Rusia viene enviando esas señales desde los 90 y que no fueron leídas. "Nos dejamos vender", dijo la presidenta del parlamento europeo, "por el petróleo y el gas barato de Rusia, y sacrificamos nuestros valores".

3. Narrativas en competencia. Lo interesante, y esta ya es mi lectura, es que Putin plantea exactamente lo contrario. Para Putin, no hubo tal "amabilidad"; todo lo contrario. Para él, las decisiones de Occidente no han tomado en consideración los intereses rusos. Interesantemente, en el foro se planteó que esta, la versión de Putin ha ganado la guerra narrativa en el sur global.

4. La política interna: la batalla por la opinión pública. El foro inició con un bombardeo de preguntas (casi ataques) sobre Mark Esper, el exsecretario de defensa de Trump. "Es hora de afrontar al elefante en el cuarto", le decían. Ese elefante salió a la luz a lo largo de todo el foro, y se llama Trump. ¿Qué pasará si ese personaje llega nuevamente a la presidencia? ¿Cómo abordar la fatiga de ciertos sectores de las poblaciones occidentales por la ayuda a Ucrania? Se reconoce un reto enorme.

5. La Guerra Total. En la Guerra Total (a diferencia de las guerras limitadas), todos los recursos disponibles de un país son empleados al servicio de un esfuerzo militar mayor. Todo, en función de la guerra. Este fue, en cierto sentido, el fantasma que dominó a este foro. La industria, las cadenas de abasto, los equipos, la tecnología, la ciencia, la investigación, los presupuestos, la política para que esos presupuestos se aprueben, el rol de las empresas, todo debe estar alineado, decían, para enfrentar el reto que estos países sienten de frente. No es solo Ucrania y no es solo Putin. "Solo así podemos evitar el conflicto". Solo así podremos "estabilizar" la situación. Solo "exhibiendo fuerza se logra disuadir al enemigo" en esta macroempresa que tiene que entenderse como de larguísimo plazo.

Estos discursos no sorprenden en este tipo de foros, pues reflejan la postura de la OTAN y sus miembros. Lo que pasa es que esta vez, fue muy iluminador el sentimiento de que estos temas son de muy largo plazo, el sentimiento de culpa por no haberlo visto, y la necesidad de preparar a las sociedades enteras para un estado de alerta permanente, en el que tienen que participar todos los sectores de esos países en función de la disuasión permanente.