Guaymas, entre Asia y Norteamérica: distribuidor de riqueza
Por Yarí Borbón Gálvez*
Aunque México observa un gran rezago en competitividad, regiones como la ciudad y puerto de Guaymas poseen gran potencial para contribuir a resolverlo. Entre los grandes proyectos de infraestructura que la nueva administración pública federal contempla, como parte de su estrategia para mejorar su posición 46 en competitividad económica global y 53 en materia logística, se destaca la construcción del corredor transísmico multimodal de Salina Cruz Oaxaca del Océano pacífico al Golfo de México, que eventualmente conectaría Asia con el este de Estados Unidos y Europa.
Sin embargo, es poco probable que el corredor transísmico promueva la competitividad logística de México, toda vez que se forja como competidor débil de los servicios que ofrece el Canal de Panamá, no solo por no garantizar mejores tiempos y costos de transporte, sino por no contar con una estrategia logística articulada a las redes globales de producción.
La ciudad y puerto de Guaymas, Sonora, sería potencialmente un nodo conector entre Asia y Norte América, con gran proyección económica. Su conformación aseguraría un modelo ‘ganar-ganar-ganar’ para Asia-Guaymas-Norte América, si su diseño acompaña una estrategia de política industrial que integre: 1) Zonas Económicas Especiales, estas de la misma forma que son factores de canalización de inversiones globales a China, alentarían la localización industrial y de servicios en Guaymas; 2) La integración sistémica de la diversificada red de transporte de mercancías: marítimas, aéreas, ferroviaria y carretera; y 3) La concreción de la propuesta de un corredor fiscal basado en altas tecnologías de Guaymas a Nogales, Arizona que confine y asegure el tráfico de mercancías.
Sin embargo, más allá de la eficiencia expresada en costos y tiempos de transporte, el principal atractivo de Guaymas es su posición estratégica para producción modular y postergación (postponement) de ensamblaje final, que es la clave del éxito de las redes globales de producción. Esta estrategia consiste en exportar componentes bases a múltiples mercados, y producir o ensamblar los elementos diferenciadores lo más cercano al mercado posible. Como ejemplo, una laptop sin teclado puede exportarse a todo el mundo, y los teclados pueden ensamblarse en el país del mercado final en el idioma de tal país. Esto suele generar ahorros por menores impuestos de importación y por mayor eficiencia logística, los cuales tienden a ser mayores que los costos de producción o ensamblaje en el país del mercado final.
Guaymas, por lo tanto, podría ser precisamente el nodo de producción y ensamblaje para mercados finales. Los industriales asiáticos obtendrían ventajas al exportar componentes bases a Guaymas, donde se realizaría la producción y/o ensamblaje final para los mercados de Estados Unidos y/o México. La misma lógica funcionaria para exportadores de componentes bases de México o Estados Unidos a Guaymas, y ensamblar a la medida y justo a tiempo para el embarque a su mercado final, a través de la diversificada red de transportación, a cualquier punto del orbe.
Una estrategia de tal naturaleza requiere políticas industriales, inversiones en infraestructura, acuerdos estratégicos de colaboración con Estados Unidos y países asiáticos, para dar soporte al reciente crecimiento industrial guaymense, sin embargo, particularmente se requiere de la voluntad de los actores público privados así como de la ciudadanía para diseñar conjuntamente y en breve, una visión de largo plazo para esta ciudad-puerto como un 'heroico' motor del crecimiento en México.
*Dr. Políticas Científicas y Tecnológicas. University of Sussex, Inglaterra.
Investigador, Centro sulla Logistica e Supply Chain Management. LIUC-Università Carlo Cattaneo. Italia
Post Doctorado, Transport en Ruimtelijke Economie. Universiteit Antwerpen, Bélgica.
CRISTI Inclusive Science, Technology and Innovation Centre. México.
yari_borbon@yahoo.com