Gurría, ¿el candidato de la oposición?

A mi teléfono le deben estar haciendo labores de inteligencia.

Florestán

Ayer entrevisté a quien podría ser el candidato de oposición que dé batalla al del oficialismo en las presidenciales de junio del año que viene.

Me refiero a un mexicano que ha sido secretario de Relaciones Exteriores y de Hacienda, quince años secretario general de la OCDE, tiene relaciones con la mayoría de los jefes de Estado y gobierno del mundo, es un avezado economista, bueno para la polémica y el debate, capaz y estructurado y un apunte, habla seis idiomas: José Ángel Gurría.

Yo sé que el morenismo dirá y para qué sirve un candidato con esas características cuando lo que hay que gobernar es a México y 125 millones de mexicanos.

Y sí, los entiendo, así han sido gobernados en los últimos 52 meses, pero hay un amplio sector que el mismo Presidente ubica en la clase media y calcula en 25 millones de opositores que quizá piensen que ha llegado el momento de otra alternancia, como ocurrió en 2000, con Vicente Fox y el PAN, en 2012, con Enrique Peña Nieto y el PRI y en 2018, con López Obrador y Morena.

Obvio que él da por descontado su triunfo en 2024 y la prolongación de su cuarta transformación con la continuidad con cambio y la consolidación de su proyecto político y de gobierno, para lo que ya hasta ha establecido una agenda de deberes a cumplir por su sucesor(a).

Pero eso depende de que gane las elecciones, lo que parecía un día de campo de no ser por la irrupción de Gurría, claro, si es que el egoísmo y los intereses de los dirigentes de los partidos políticos lo dejan pasar como el candidato de la alianza opositora.

Porque son tan miserables…

RETALES

1.- VETO. El Presidente dijo que vetó a los dos comisionados del INAI aprobados por el Senado por el enjuague de los partidos que se repartieron, uno Morena y otro el PAN. Y que él no es cómplice. El hecho es que deja a ese instituto en vía de parálisis, como le gusta, a partir del día 31;

2.- RESPUESTA. Ricardo Monreal rechazó ayer lo de los enjuagues y habló de una negociación parlamentaria para salvar al INAI de la parálisis. También me confirmó lo que revelé ayer del interés de PAN-PRI-PRD para ser su candidato presidencial en 2024, para lo que se reunieron en octubre, noviembre y diciembre, pero ya es un proyecto muerto. Que él va por Morena. Y dejó una rendija para la Ciudad de México; y

3.- PERDÓN. Sí, a los amigos de la 4-T, justicia y gracia. Es el caso de Ignacio Ovalle, a quien el Presidente designó director de Segalmex y en la que se ha cometido el fraude del sexenio: Quince mil millones de pesos. Ayer López Obrador lo exoneró. Dijo que es una buena persona pero que se rodeó de priistas de malas mañas acostumbrados a robar, y los mete y empiezan a hacer negocios. Sí, pero Ovalle no. Y esa buena persona, ¿nunca se enteró del mayor robo del sexenio? Sé amigo y que lo demás te valga madre.

Nos vemos el martes, pero en privado.