El ancho basurero de la historia
"El ancho basurero de la historia", escribe Joaquín López-Dóriga en #EnPrivado
Son de los que creen que a la historia se entra por decreto personal.
Florestán.
Todos los presidentes de los que como reportero me ha tocado escribir las crónicas de sus tomas de poder, desde el 1 de diciembre de 1970 con Luis Echeverría, pasando por José López Portillo, Enrique De la Madrid, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y López Obrador, 2018, y el próximo 1 de octubre el arribo de la primera presidenta de México, siempre han visto que su mandato no tiene fin, lo que les ha dado espacio para equivocarse pero no para corregir.
En el correr de estos casi sesenta años de profesión a todos les he preguntado, menos a López Obrador que sólo habla con sus incondicionales, si saben que tras Palacio Nacional está la calle de la Soledad y ninguno lo supo y menos que en ese cargo los días corren despacio y los años vertiginosos, lo que no comprenden hasta cuando hay un candidato, en este caso candidata, que les resta presencia, fuerza, liderazgo y protagonismo.
Es cuando al atardecer de sus presidencias y poder, los árboles alargan sus sombras.
Así los he visto a todos ellos, incluso a López Obrador, de quien los suyos afirman que es incombustible y será eterno porque sin él no hay movimiento y sin movimiento no habrá cuarta transformación y sin ésta no alcanzará el espacio histórico donde se ha querido colocar al lado de Hidalgo, con la Independencia, Juárez con la Reforma, Madero con la democracia.
A partir del domingo por la noche, cuando haya una presidenta, se le achicará espacio, discurso y protagonismo.
A menos que quiera necear, no sería el primero y la realidad lo mande a su espacio real como cero a la izquierda, claro, La Chingada, su finca en Palenque, destino histórico que reiteradamente ha hecho suyo y sin alcanzar a entender cómo desperdició el tiempo, que quiso detener y hacer suyo lo que lo pondrá entre el acceso y el basurero de la historia.
RETALES
1.- ACOSO. En las mil 337 mañaneras, el presidente López Obrador se ha referido a este reportero en más de 300 ocasiones. Ayer se quejaba que hay reportajes que dañan a su familia. ¿Y usted cree que su permanente persecución no ha afectado a la mía? Porque a mí usted me hace lo que el viento a Juárez. No sea mala entraña;
2.- CUAUTLA. Uno de los estados más violentos del país es Morelos, donde el crimen organizado manda. El domingo elige gobernadora. Ayer asesinaron a Ricardo Arizmendi, suplente de candidato a la alcaldía de ese municipio que, como el estado, hoy domina el narcotráfico; y
3.- DEUDAS. ¿Y la vacuna Patria y los respiradores y la falta de vacunas y los 800 mil muertos por Covid y los 188 mil asesinados y cincuenta mil desaparecidos y Dinamarca y Dos Bocas y la corrupción y la gasolina a diez pesos y el huachicol y el crimen organizado? Sólo para dejarle algunos pendientes.
Nos vemos mañana, pero en privado.