La tragedia vista por otros ojos
Lunes, martes y miércoles de esta semana, el tema en este espacio fue la desgracia de Tlahuelilpan.
A continuación la visión de algunos lectores, comenzando por los que atraparon una kilométrica equivocación:
Víctor Arana:
“El Chavo del Ocho te habría dicho ¡Pero cómo eres bruto!, porque diámetro no es lo mismo que perímetro”.
Leopoldo Guzmán:
“El diámetro aproximado de la Tierra es de 12 mil kilómetros. El perímetro de 40 mil”.
JJ Espinosa:
“Su texto ‘Huachicoleo para principiantes’ no tiene provecho alguno. Temo se le ocurra escribir algo como una Guía para robar en los Walmart. Ánimo, lo considero más constructivo”.
Cuauhtémoc Cortez:
“Es triste ver que se humilla al Ejército Mexicano. Tú sabes que un ejército sólo puede ser rebasado por otro ejército mejor equipado, pero nunca por la población civil y menos en momentos de peligro para las personas, aunque éstas sean irresponsables”.
Sixto Ríos Vázquez:
“Usted es uno de todos los rateros con credencial que hay en México. ¿Que no, señor?”.
Jesús Flores:
“En su texto ‘En este pueblo sí hay ladrones’ dice usted que el presidente AMLO está empeñado en lograr el milagro que ni siquiera Jesucristo, Buda, Mahoma, el Papa o el Estado Islámico se propusieron: purificar la nación y terminar con la canija condición humana, soñando que todos nos portaremos bien. ¿Tan poquita fe le merece la humanidad? ¿Tan poco conoce usted de cómo Chile, Alemania, Inglaterra o Japón pudieron transformar sus sociedades de crimen y violencia al orden y el progreso? ¿Qué es lo que usted propone? Sus columnas reflejan amargura, cinismo, enojo, molestia, crítica eterna. ¿Tan mal lo ha tratado la vida? Ojalá aprenda a tener fe y a respetar la voluntad de 30.5 millones de sus compatriotas. Usted fue cómplice del cómodo silencio frente al desmedido crecimiento de la corrupción y de la impunidad. Ojalá el valor, la hombría, de recapacitar y empezar a tener una poquita de fe. A todos nos conviene que nuestro gobierno triunfe. A usted pareciera interesarle, más bien, que fracase”.
Gustavo Mendieta:
“En México la primera regeneración debe ser de honestidad y ética porque hay poca cultura de respeto por el bien común. Y no es cierto que sólo “los de arriba” roban. Es muy común que muchos quieren robar lo que se pueda. Se debe, como prioridad, reforzar los valores en las escuelas públicas y AMLO convocar a la sociedad a respetar el Estado de Derecho y quitarse la cantaleta de que sólo los de arriba roban y que el pueblo es bueno y puro. Reconocer que la deshonestidad es común en todos los niveles, porque esta es nuestra verdadera tragedia”.
Carlos de Jesús Morales:
“El fiscal Alejandro Gertz elude calificar a los ‘huachicoleros’ de Tlahuelilpan como ladrones. Pese a la cacareada autonomía, repite el discurso del Gobierno con eso de que se ven obligados… ¡a delinquir!”.