¿Vivimos en la realidad?

Es la ‘B’ de la ‘A’ lo que causa la ‘C’.

 Hay personas que se limitan debido a su definición sobre su realidad. Pero déjame preguntarte: ¿Qué es la realidad? La realidad es sólo la percepción que tienes sobre algo. Por eso es que mi realidad es muy diferente que la tuya, y nuestras realidades son tan diferentes a las de las demás personas.

No vivimos en la realidad, sino en nuestra percepción de la realidad.

Nuestra autoimagen también es sólo una percepción, basada en lo que hemos aprendido, consciente o inconscientemente, incluso desde mucho tiempo antes de que tuviéramos la capacidad de razonar.

¿Cuántas cosas crees en estos momentos, que te están limitando, pero que no puedes hacer nada al respecto porque así es tu realidad? ¿Alguna vez has tenido alguna reacción a lo que te sucede, sólo porque eso es lo normal así reaccionaría cualquier persona que le sucediera lo mismo?

Imagina el siguiente escenario: Vas manejando y alguien te choca, así que te molestas. Puedes decir “Esa persona me chocó e hizo que me enojara”. El “Evento Activador” (A) es el choque. La “Consecuencia” (C) es tu enojo.

La pregunta es, si 100 personas pasaran por lo mismo, ¿reaccionarían todas igual? ¿Todas tendrían el mismo nivel de enojo que tú? Seguramente habrá personas igual de molestas que tú, otras que estén más molestas y otras que estén menos. Sin embargo, también habrá personas que lo acepten sin molestarse, otras sentirán culpa, otras manifestarán preocupación por el carro, otras sentirán miedo, y quizás haya otras que sientan amor y agradecimiento porque ninguna persona salió herida.

¿Te das cuenta? Todas esas son posibles consecuencias “C” para un mismo evento “A”. Y si existen tantas posibles “C” para una misma “A”, quiere decir que no es posible que sea “A” quien cause la “C”. Son nuestras “Creencias” (B) sobre el evento “A” las que causan la emoción “C”.

Es la “B” acerca de la “A” lo que causa la “C”. Es la creencia del evento activador lo que causa la consecuencia (tu emoción). Y diferentes creencias, resultan en diferentes interpretaciones de una misma realidad.

¿Te acuerdas que decías que la otra persona causó tu enojo? Podemos tener la plena seguridad de que no fue la otra persona, sino tú mismo(a). Sé que es algo difícil de aceptar, pero recuerda la curiosa paradoja: “Cuando me acepto tal como soy, entonces puedo cambiar”.

Y, como dijo Epicteto: Somos disturbados, no por los eventos de la vida, sino por la visión que tomamos de ellos.

Para cerrar la nota, si alguna vez crees que no puedes modificar tus creencias, o que tú simplemente nunca creerías algo que no es real, recuerda que alguna vez creíste que un gordito simpático viajaba en un trineo alrededor del mundo, jalado por renos voladores y que repartía juguetes a niños y niñas que se portaban bien.

El autor es escritor, Capacitador, Conferencista y Life Coach en SB3.

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