Verano

El autor es Profesor-Investigador.

(PARTE 2)

Con las primeras computadoras digitales se crearon los primeros equipos de investigación de aprendizaje automatizado, y en la agenda estaban temas como programas de ajedrez inteligente y demostrar si una computadora podría hacerse pasar por humano en un juego de preguntas y respuestas.

No duró mucho esta breve primavera, pues muy pronto llegó el invierno: El Invierno de la Inteligencia Artificial (IA).

Éste fue un periodo en el que se retiró el presupuesto a los proyectos de IA desarrollándose en universidades de prestigio en Estados Unidos y Reino Unido.

Una primera etapa ocurrió en 1974, y una segunda en 1987.

Y esto se debió a que había grandes expectativas como la de presentar un programa de traducción de lenguaje ruso a inglés, o un programa que comprendiera lenguaje natural.

Sin embargo, uno de los ejemplos más representativos de este optimismo exagerado es el de Seymour Papert, que a inicios del verano de 1966, dedicó un proyecto de Visión por Computadora a dos estudiantes para que escribieran un conjunto de programas que pudieran detectar objetos enfocados y el fondo.

Muy pronto lo que era una tarea de semestre corto para dos alumnos, se convirtió en el proyecto que incluyó a casi todo el departamento de Inteligencia Artificial del MIT (Massachussets Institute Of Technology), y por supuesto que no pudieron resolverlo a tiempo, no fue hasta 46 años después, en junio de 2012, que investigadores de la empresa Google, liderados por Andrew Ng, lograron reconocer figuras de gatos en videos de Youtube.

A partir de 1993 los presupuestos para investigación regresaron a las universidades, pero los investigadores no llamaban Inteligencia Artificial a su trabajo, por temor a que las altas expectativas sobre el término le restaran valor a su estudio.

Surgieron términos como Minería de Datos, Aprendizaje Automatizado, Procesamiento de Lenguaje Natural, Reconocimiento de Voz, Autos Autónomos y otros términos.

Éstos empezaron a producir frutos a finales de los 90 e iniciando el nuevo milenio, creando una explosión de productos informáticos que han transformado nuestras vidas: anuncios a la medida para cada persona, traducción automática de textos y de voz, reconocimiento de animales y objetos en imágenes y video, programas generadores de texto, chats robóticos que ayudan a resolver problemas, vehículos que se conducen solos, operadores telefónicos robóticos de lenguaje natural, autocorrector de texto cada vez más inteligente, entre muchos otros más.

Ahora que nos acercamos a la madurez del campo, es imperativo realizar las inversiones necesarias para implementar proyectos que aprovechen las técnicas de Inteligencia Artificial para hacer más eficientes los procesos en instituciones, como el sector Salud, el de comercio y la industria en general, contamos con las herramientas y se está entrenando personal que pueda dominar dichas técnicas.

En cuanto a los subtítulos automáticos en la televisión que les contaba al principio, éstos se encuentran disponibles desde 2009 en YouTube, sólo hubo que esperar 20 veranos para que se hicieran realidad.

El autor es Profesor-Investigador, responsable de la Maestría en Ingeniería en Internet de las Cosas e Inteligencia Artificial, del Dpto. de Ingeniería Industrial de la Universidad de Sonora.