Sobre elecciones y mercadotecnia

El autor es director General de Herrera Publicidad e integrante de Aspac.

Hace unos días, Estados Unidos tuvo su día de votación para Presidente de la República, senadores y diputados.

Más allá de los resultados y los conflictos posteriores, podemos aprovechar para analizar algunas estrategias electorales que puedan servir para las próximas elecciones en México.

Lógicamente, la situación actual marcó una forma completamente diferente de hacer campaña, con muy pocos eventos masivos y poca interacción personal/física entre los candidatos y los votantes.

Se tuvo que depender más de los medios de comunicación, en especial la televisión, para llevar sus mensajes, y por supuesto, de las redes sociales.

Vimos cómo los candidatos combinaban la producción de videos profesionales con transmisiones improvisadas desde el celular, promoviendo la interacción del público.

Aun cuando es sumamente atractivo el uso de las redes sociales, no hay que olvidar que la atención de la gente se divide en una gran cantidad de intereses durante el día.

Al navegar por su Facebook, Instagram, Twitter, YouTube o TikTok, cada persona le dedica tiempo a las cosas que más le interesan, a sus marcas favoritas, a sus amigos, a las noticias, al entretenimiento.

Y contra esa saturación deben trabajar los candidatos, que en su gran mayoría carecen de temas que le interesen al ciudadano común.

Quienes logren captar la atención con mensajes creativos y dinámicas inteligentes, llevarán una clara ventaja.

En esta campaña vimos conceptos novedosos, con un mayor énfasis en temas relevantes para los adultos jóvenes modernos, para aquéllos que le dan importancia al cuidado del medio ambiente, al respeto a las diferencias personales o a los que están dispuestos a manifestarse en contra de lo que consideran injusto.

Esta agenda, que algunos llaman progresista, puede encontrar a su más visible personaje en Alexandra Ocasio-Cortez, que ganó en 2018, contra todos los pronósticos, un escaño en la Cámara de Representantes, convirtiéndose a sus 29 años de edad como la Diputada más joven en la historia de Estados Unidos.

Hoy fue reelegida.

Mejor conocida como AOC, es una mujer hispana, joven, inteligente y dispuesta a ser escuchada. Sumamente activa en redes sociales, tiene una personalidad semejante a una celebridad, pero con temas claros de impacto en políticas públicas.

Representa un perfil que se convertirá en el modelo a seguir en otros países.

Por otro lado, el consenso de las encuestas predecían una Ola Azul, donde el Partido Demócrata ganaría con amplia mayoría no sólo la Presidencia con Joe Biden, sino también ambas cámaras.

La realidad fue distinta, pues los votos fueron bastante más parejos entre ambos partidos.

Hubo casos con diferencias de más de 10 puntos porcentuales entre las encuestas y la realidad, muy por encima del margen de error.

Esto ya está siendo tema de importantes conversaciones entre los estrategas políticos y dentro de las mismas casas encuestadoras, pues la mayoría de ellas contaban con muy buena reputación y pregonaban su independencia.

Desgraciadamente, en México hay pocas casas encuestadoras que tengan esa buena reputación, y ya la práctica de publicar encuestas es vista con muchas reservas.

Veremos la importancia que tendrán las mismas en el próximo ciclo electoral en nuestro país.

Por último, cabe resaltar el activismo de algunas personalidades, que no sólo salieron a dar la cara por las causas y candidatos preferidos, sino también por la promoción del voto.

El gran enemigo es la indiferencia, así que fueron muy importantes para entusiasmar al público y motivarlos a salir a votar.

Twitter e Instagram se saturó de selfies con la calcomanía de Ya Voté.

Habrá que ver quiénes son esas personalidades del espectáculo y los deportes en México con la capacidad de influir.

El autor es director General de Herrera Publicidad e integrante de Aspac.