¿Qué necesitas para ser feliz? No busques afuera lo que tienes dentro
El autor es escritor, capacitador, networker, conferencista y Life Coach en SB3.
¿Alguna vez has deseado algo, y crees que al obtenerlo serás feliz?
Recuerdo que cuando era niño, estaba enviciado en el Nintendo y siempre quería nuevos cassettes.
Cuando salía un cassette de algún juego que me gustaba, lo deseaba.
Cuando finalmente me lo compraban, me sentía el niño más “feliz” del mundo, podía pasar horas y horas jugando... durante la primera semana.
Cuando me terminaba el juego, se acababa el encanto y ya dejaba de ser el niño más feliz hasta que conseguía un nuevo cassette.
Viendo mi vida en retrospectiva me he dado cuenta que, aunque ese ejemplo fue con algo sencillo, realmente se ha repetido ese patrón de comportamiento, he deseado muchas cosas que cuando las he conseguido me han emocionado y me han hecho sentir una felicidad temporal, pero con el tiempo pierden el encanto.
Entonces, ¿qué es lo realmente valioso?
¿Qué es aquello que de verdad da felicidad?
Quizás pienses que un carro nuevo, una casa nueva, dinero en el banco, etc., te brindarán la felicidad, pero pasará el mismo efecto que con el cassette de Nintendo.
Si no podemos ser felices, ni agradecer por lo que tenemos y lo que somos en este momento, no podremos llenar ese hueco con cosas materiales.
Será como tapar baches con tierrita, y esa no es una solución duradera.
Pasamos la vida persiguiendo la felicidad, pensando que la obtendremos cuando tengamos X o Y cosa, cuando la verdad es ya nos sobran motivos para ser felices, sólo que nuestro enfoque está en el lado equivocado.
¿Qué motivos tienes para agradecer?
¿Tienes salud?
¿Tienes un techo?
¿Tienes personas que te aman?
¿Puedes respirar?
Y quizás pienses que esos no son motivos para agradecer, ya que siempre los has tenido.
Pero permíteme preguntarte, ¿alguna vez te ha dado gripe, te has mormado y has intentado dormir?
Es muy desesperante.
Y si de repente se destapa tu nariz y puedes respirar, ¡te sientes feliz!
¿Pero cómo es que te sientes feliz por respirar, si hace un párrafo atrás decías que no podías agradecer por respirar?
Lo que pasa es que las necesidades satisfechas no motivan.
El problema está cuando las perdemos.
Si con una gripita sin chiste andamos extrañando respirar, ¡imagínate con una pérdida más grave!
Así que cierro esta nota con dos comentarios:
1.- Para que no suene conformista, puedes sentirte feliz y agradecer por lo que tienes, mientras vas por lo que deseas.
De esa manera no llenarás tus huecos con tierrita, sino con cemento y podrás avanzar mejor.
2.- Si sientes insatisfacción en diferentes áreas de tu vida, ¡Agradece!
Si las necesidades satisfechas no motivan, significa que la insatisfacción sí, ¡Canaliza tu energía correctamente y motívate!
Date cuenta de todo lo que tienes, y de todas las oportunidades de ir por más.
Donde pones tu foco, pones tu luz.
El autor es escritor, capacitador, networker, conferencista y Life Coach en SB3.
beltr0nes@hotmail.com
Facebook.com/SantiagoBeltrones3