Mujer fatal
La autora es guionista, Maestra en Artes-Escritura de Guion por la Universidad Napier de Edimburgo.
La ‘mujer fatal’ es un arquetipo de personaje presente en el imaginario desde la antigüedad, que tuvo una importante presencia en el cine del Siglo XX. Es la seductora, que con sus encantos femeninos seduce al noble héroe y lo conduce por el “mal camino”.
Es Phyllis (Barbra Stanwyck) en “Doble Indemnidad” de 1944, la mujer que seduce a Walter, el noble corredor de seguros y lo convence de ayudarla a asesinar a su marido y los dos quedarse con el dinero. Es una mujer que tiene control sobre su cuerpo, su sexualidad y su vida. Por lo general, la narrativa castiga a una mujer fatal. La pobre Phyllis, por ejemplo, termina muerta a manos de Walter.
Casi siempre este personaje se veía contrastado con la mujer virginal, que no tenía lugar en la narrativa más que apoyar y enaltecer la historia del noble héroe. Esta dicotomía prevaleció hasta el surgimiento de la Teoría Feminista del Cine en los años 70.
Las analistas y académicas estudiaron a la ‘mujer fatal’ como personaje. Lo que revela su estudio a detalle es simple. Para los hombres que estaban escribiendo y dirigiendo esas películas, una mujer poderosa era una mujer peligrosa.
Estoy consciente de que pude haber perdido a la mitad de mis lectores al usar la palabra ‘feminismo’. Hay muchos a quienes les incomoda su uso porque creían que ya habíamos puesto este tema a dormir. Creemos que vivimos en un mundo post feminismo.
En los 90 se vio el auge de la “mujer poderosa” en el cine y la televisión, por ejemplo. Tuvimos a Ripley en ‘Alien’ y a Buffy en ‘Buffy, la cazavampiros’. “Ya la hicimos”, dijeron. Pero resulta que a esas “mujeres poderosas” simplemente se les habían incrustado las características del héroe de acción masculino y ya.
Hasta hace unos años, Marvel y Warner Bros. sostenían que una película de superhéroes con una mujer a la cabeza no podía ser rentable, hasta que ‘La Mujer Maravilla’ demostrara lo contrario.
Cuando ‘Capitán Marvel’ estaba por estrenarse, se esparcieron falsos rumores de que todos los actores de Marvel odiaban a Brie Larson. Trataron de desprestigiar a ‘Los Ángeles de Charlie’ citando a su directora, Elizabeth Banks, fuera de contexto.
Más recientemente ‘Aves de Presa’ fue reportada como un fracaso en la taquilla, a pesar de que en su primer fin de semana recuperó su inversión. Si bien no es un home run, tampoco es un desastre financiero. Han sido muchos los ejemplos, y tan parecida su estrategia, que ya es imposible negar que se trata de campañas deliberadas de mala fe.
Una sentada frente a la computadora y el mínimo de investigación revelan que muchos de quienes participan en esta campaña, y quienes claman que ya no necesitamos el feminismo son los mismos.
No vivimos en una sociedad post feminista, y esto se refleja (entre muchas otras cosas) en los personajes de películas y series que vemos, pero sobre todo en cómo reacciona el público ante ellos.
Lo cierto es que, aunque el poder de la mujer tenga una cara diferente a la seductora de los años 40, para muchos, una mujer poderosa sigue siendo peligrosa.
La autora es guionista, Maestra en Artes-Escritura de Guion por la Universidad Napier de Edimburgo.
@alexamenexa