La curva de aprendizaje

El autor es Presidente Nacional del Colegio Mexicano de Profesionales en Gestión de Riesgos y Protección Civil, A.C.

En los próximos meses tendremos cambio de gobiernos locales, y como mandata la ley, la elaboración de los planes de desarrollo que incluirán los mejores propósitos y líneas de acción de los nuevos gobiernos los cuales derivarán en políticas públicas sectoriales.

“Las políticas públicas son acciones de gobierno con objetivos de interés público, que surgen de decisiones sustentadas en un proceso de diagnóstico y análisis de factibilidad” (Franco Corzo  Julio; 2014).

De ésta definición encontramos entonces palabras claves que definen su esencia, primero que debe de tener un beneficio público y general y segundo, que la política pública debe de ser resultado de un análisis profundo sobre las mejores alternativas para resolver la problemática existente.

También es importante señalar que para tener una política pública exitosa y legítima, es de suma relevancia la participación de la sociedad civil. La gobernanza debe de ser en las fases de diagnóstico, implementación y evaluación.

Eso sería lo ideal, pero sabemos que generalmente no funciona así, quedando sólo como un discurso vacío, ya que uno de los principales problemas que tiene la administración pública, es el bajo rendimiento o poca productividad en los asuntos especializados basados por el lento aprendizaje que le impide tomar decisiones asertivas.

Es la llamada “curva de aprendizaje” que ocurre en aquellas personas que sin cumplir con el perfil idóneo, le asignan por compromiso político o compadrazgo un puesto público y acepta

usurparlo.

La curva de aprendizaje se refiere al diagrama representado por una línea de esa forma que resulta de la interacción de las variables tiempo y resultados; describe la medida que una persona va en el tiempo, aprendiendo coómo desempeñarse y hacer cada vez mejor su trabajo.

El sector privado generalmente asume ese costo porque invierten en personal sin experiencia para desarrollarlo.

Esto les permite que compartan la misión, visión y valores de la empresa. Para el servicio público no debería de ser así, yaque el aprendizaje resulta muy costoso y generalmente la pérdida no sólo es económica, sino que también es social porque la mala toma de decisiones puede afectar a una comunidad.

Para el tema de protección civil, en las administraciones municipales con duración de tres años, la curva de aprendizaje tiene un alto costo, a veces hasta resulta en pérdida de vidas o del patrimonio público y privado; se trabaja con visión de corto plazo, del día a día.

Considerando la curva de aprendizaje, tarda casi un año en aprender y en el tercer año son prácticamente 6 meses electorales, restando sólo un año y medio de actividad productiva.

La gestión del riesgo no se puede dar ese lujo, ya que para ser eficiente se requiere  de acciones transversales prospectivas, preventivas y un gran trabajo de convencimiento hacia otros funcionarios al interior de la propia administración.

Esperemos que los nuevos gobiernos tengan en cuenta la “curva de aprendizaje” yaque ante la escasez de recursos, será indispensable contar con colaboradores que reúnan la creatividad, conocimiento y experiencia necesaria en sus áreas de especialidad, para trabajar de forma estratégica en la innovación de procesos y gestión, el uso de nuevas tecnologías, el rediseño y estandarización de procesos y así, dar los resultados que la sociedad espera de ellos.

El autor es Presidente Nacional del Colegio Mexicano de Profesionales en Gestión de Riesgos y Protección Civil, A.C.