Ciudad de basura y polvo

Es inevitable, hay muchas zonas de la ciudad por las que uno circula y lo primero que se encuentra es una casa abandonada o un terreno baldío que poco a poco se fue convirtiendo en un basurero clandestino.

Es increíble pero parece que todos los terrenos y casas abandonadas, o si no, la gran mayoría, tienen un letrero de “Venga y ponga su basura aquí”. Y pudiéramos decir que es un

problema del Ayuntamiento, y de hecho es al que le toca limpiar en muchas ocasiones esas grandes acumulaciones de desechos, colchones viejos, muebles rotos, animales muertos, fierros viejos,

o simplemente bolsas llenas de la basura que todos acumulamos en casa.

Empieza con una o dos bolsas y, como nadie las recoge, después llegan más y más y más y cuando menos piensan los vecinos tienen un basurero clandestino a un costado de su casa, o en frente o en la esquina de la calle.

¿Y qué pasa?, se convierte en un problema social y de salud porque esa basura atrae fauna nociva, y en temporada de calor, no me dejaran mentir, la peste es insoportable sobre todo si lo tienes

a un lado y luego llegan las moscas y las enfermedades. Y si hace viento, este se encarga de esparcir  los desechos incluso a los carriles de circulación de las calles.

Antes de que eso pase empiezan los reportes al Municipio para que Servicios Públicos vaya y limpie “el cochinero” y algunas veces, no digo que muy seguido, pero pasa, van y limpian el lugar ¿

Y que creen que ocurre después? Se vuelve a llenar de basura porque la gente ya está acostumbrada a tirar su basura ahí.

¿Por qué? esa sería la pregunta, porque si hay un servicio de recolección de basura que pasa por las colonias de la ciudad, dos veces por semana, cuál puede ser la razón por la que las personas, en vez de tirar la basura, cuando pasa el camión, o en algún contenedor, prefiere hacerlo en un terreno o en una casa abandonada. Ahí el gran misterio.

Pero el problema está ahí y para bien o para mal el Ayuntamiento tiene que encontrar una solución porque son muchos realmente, se lo digo, porque he recorrido varias colonias de esta

ciudad y le puedo decir que hay demasiadas concentraciones de basura y eso representa una situación que debe ser resuelta en algún momento, porque no se puede dejar que la ciudad continúe cayendo, que su imagen vaya en detrimento.

Ahora, lo que es una realidad  es que el Ayuntamiento no debe estar solo, porque el problema definitivamente es causado por los mismos ciudadanos, que no les importa tirar su basura en cualquier lugar sin pensar en el daño que ocasionan a los vecinos de otra colonia, porque no creo que la tiren en su misma calle.

Esos ciudadanos deben ser parte de la solución también, todos debemos poner nuestro grano de arena para que la ciudad se vea menos sucia, con algo muy simple, tirando la basura donde se

debe tirar y entender que esos basureros clandestinos son un problema de todos y afectan a todos.

Hay que recordar que después de las lluvias viene el dengue y todos esos basureros clandestinos, se van a convertir en focos de infección para todos. Además hay muchas calles en

colonias del centro que algunas vez estuvieron pavimentadas pero como no les dieron rehabilitación, ya de asfalto queda muy poco o nada y lo que hay es tierra que se convierte en polvo.

Ni hablar de las calles del norte que nunca han sido pavimentadas, ahí el polvo es el pan de cada día. Ojala y pronto las autoridades encuentren esa formula mágica para que los basureros desaparezcan, para hacer realmente responsables a los dueños de los predios o casas abandonadas, que usualmente o viven en otro estado o país o ya murieron o simplemente no les interesa y que haga que esas personas que se encargan de llenar esas concentraciones de desechos dejen de hacerlo. Se vale soñar.

La autora es licenciada en Ciencias de la Comunicación y Periodista desde 1982, ahora reportera en Expreso.