Guerras informativas, polarización y teorías conspirativas en EU
Guerras informativas, polarización y teorías conspirativas en EU, escribe Mauricio Meschoulam
Hay un sector en EU que piensa que existe un "Estado Profundo" que libra una guerra en contra de Trump. No solo eso. Entre ciertos ciudadanos de ese sector, existe la convicción de que el mundo es dirigido secretamente por un grupo de pedófilos satánicos que operan una red de tráfico de niños. De acuerdo con esta teoría, personalidades como Obama, Hilary Clinton, George Soros y ciertas celebridades, están incluidas en este grupo selecto. Trump, en esta narrativa, habría sido reclutado por militares para deshacerse de esta red. Según se ha reportado, estas teorías proceden de una persona o grupo anónimo que utilizaba el nombre "Q", quien alegaba que tenía acceso directo a secretos de gobierno. Actualmente se les conoce como las teorías QAnon, un fenómeno que en su momento era absolutamente marginal, pero que paulatinamente ha ido ganando adeptos y se ha convertido en parte de la conversación central. Su penetración en internet y redes sociales es inmensa. ¿En qué consiste este fenómeno?
De acuerdo con Sunstein (2016), el mayor predictor de que alguien crea en una teoría conspirativa, es su creencia previa en otra conspiración. Además, las noticias falsas tienen un mucho mayor alcance e impacto que las noticias verdaderas y la principal puerta de entrada en el proceso de radicalización de extremistas de derecha, son sitios de internet que hablan de teorías conspirativas.
Así, la penetración de las teorías conspirativas tiene un componente de crecimiento orgánico a raíz de los algoritmos que utilizan las redes sociales. Sin embargo, la amplificación de teorías como QAnon, está siendo asistida por figuras públicas como el propio Trump. "Escuché que estas son personas que aman a nuestro país", fueron sus palabras a pregunta expresa sobre QAnon, "…realmente lo único que sé, es que parece que les agrado". Más aún, cuando Marjorie Taylor Greene, una declarada promotora de las teorías QAnon, ganó hace unos días las primarias republicanas para el Congreso, Trump, quien apoyaba su campaña, la llamó "una futura estrella republicana".
Estas circunstancias están siendo asistidas también por la intervención de agentes externos que han desarrollado una profunda comprensión de cómo funcionan el internet y las redes sociales en un país como Estados Unidos, y el amplio abanico de vulnerabilidades que esto produce. Mediante la creación de cuentas ficticias, la propagación de rumores y el reforzamiento de esas teorías conspirativas, esos actores colocan su grano de arena para inflamar aún más la polarización ya prevaleciente. Al final, la meta no es tanto "ayudar" a un candidato, sino debilitar a un país enemigo, dilapidar la confianza en sus instituciones o en su proceso democrático, asegurarse de que ese enemigo tenga que concentrarse en cómo resolver sus problemas internos, a fin de que tenga menos energía para competir o golpear a esos rivales. El momento que EU vive hoy no podía ser mejor para intervenir y avivar las llamas.
Hay que decir que, en contraste con lo anterior, estamos viendo solidificarse a un enorme movimiento de grupos y personas quienes, a pesar de tener diferencias entre sí, coinciden en la idea de que EU no aguanta otros cuatro años con Trump a la cabeza. Sin embargo, debemos estar preparados: a medida que se acerque noviembre, y si la ventaja de Biden se mantiene, veremos un protagonismo cada vez mayor por parte de estos actores internos y externos que alimentan las teorías conspirativas señaladas. Y Trump será, probablemente, el más activo de todos.
Mauricio Meschoulam
Twitter: @maurimm