Vendedores ambulantes de Obregón ya no pueden más

CIUDAD OBREGÓN, SON.- Alzan la voz vendedores ambulantes del poniente de Ciudad Obregón, pues están cansados de soportar los olores pestilentes provenientes de un canal de riego secundario que corre paralelo a la calle Kino, que se ha convertido en un basurero clandestino y lugar donde anteriormente se han encontrado cuerpos sin vida; “ya no sabemos si es olor de aguas negras o un cadáver, es insoportable e inhumano”, coinciden.Fueron los vendedores de la zona aledaña a las instalaciones de Hacienda ubicada sobre la calle 200 y Kino, que denunciaron públicamente la falta de limpieza en todo el sector que abarca el canal pues salta a la vista las cantidades de basura, maleza y acumulamiento de aguas verdosas que acarrean fétidos olores, así como la proliferación de mosquitos y otros insectos.El señor Juan Manuel, conocido como “El Manguero Amable”, tiene más de 18 años ocupando un espacio aledaño al canal, y en todos este tiempo asegura jamás haber visto que personal del Ayuntamiento realice una limpieza en la zona, mucho menos personal de Hacienda, situación que ha afectado directamente en sus ventas pues quienes pasan por el lugar no se detienen a comprar la variedad de mangos preparados que muy higiénicamente prepara.“Yo tengo limpiecito siempre aquí, llego temprano, barro todo el pedazo, limpio, desinfecto y empiezo a preparar los mangos del día. Hay veces que el aire está fuerte y se trae todo el olor. Si de por si es difícil vender estando en la plena pasadera de carros, con estos olores menos clientes me llegan”, aseguró.Por su parte, Leonardo, vendedor de aguas frescas, y Francisco, vendedor de jugos, consideran que aparte de exigirle a la autoridad se encargue de limpiar la zona, también es importante que los mismos ciudadanos respeten los espacios públicos pues no es posible que el canal esté repleto de basura si ni quiera hay casas a los alrededores, lo que los hace suponer son personas que viene exclusivamente a tirar sus desechos en este sector.Cabe señalar que este mismo canal de riego recorre gran parte del sector poniente hasta llegar al Valle del Yaqui, y en los últimos meses ha sido escenario de varios hallazgos de cuerpos flotando al interior de las aguas, por lo que es otra de las situaciones que los mantiene con la zozobra.Por último, los vendedores piden solamente la atención para poder trabajar en paz, pues aun deben sobrellevar las afectaciones de la pandemia por Covid-19 que de por sí les ha afectado en sus ingresos.